La portavoz del Gobierno regional, Esther Padilla, ha comparado la cancelación de la obra 'Qué difícil es' por parte del Ayuntamiento de Quintanar de la Orden (Toledo) --gobernado por PP y Vox-- con la dictadura franquista en la que los españoles tenían que ir a Francia para ver ciertas películas prohibidas en el país.

Padilla ha expresado su descontento con esta decisión del Ayuntamiento y ha afirmado que los vecinos de Quintanar de la Orden ahora tendrán que recurrir a otras localidades para disfrutar de esta obra. Además, ha asegurado que el Gobierno autonómico estará muy pendiente de esta situación y tomará todas las medidas necesarias para evitar retrocesos en la cultura.

La portavoz ha calificado esta cancelación como un claro caso de censura y ha criticado la visión de libertad del PP, acusándolos de imponer su moral y privar a los ciudadanos de disfrutar de la cultura si no les gusta. Según Padilla, el verdadero motivo detrás de esta censura es el temor del PP a que se aborde el tema de la diversidad sexual en la obra, no el supuesto contenido inapropiado de los actores en ropa interior.

Las compañías Los 90 Producen y La Mandanga Producciones denunciaron a través de las redes sociales la censura sufrida por parte del Ayuntamiento de Quintanar de la Orden al retirar la obra 'Qué difícil es' de la programación. Argumentaron que dicha decisión se debía a la aparición de actores en ropa interior.

Por su parte, el Ayuntamiento de Quintanar de la Orden ha rechazado las acusaciones de censura, alegando que la cancelación de la obra se basa en que no es del agrado del público local.