TOLEDO, 27 Jun.

La Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha ha revelado que, a fecha de 31 de mayo, cuenta con aproximadamente 11 millones de hectolitros en remanentes de vino y mosto, lo que representa un descenso del 30 por ciento en comparación con la campaña anterior. Concretamente, se han registrado nueve millones de hectolitros de vino en existencias, un 26 por ciento menos, y 1,5 millones de hectolitros de mosto.

El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, informó a los medios antes de la reunión del Comité Regional Vitivinícola sobre estas cifras. Según el consejero, este descenso se debe a la "corta" producción de la presente campaña vitivinícola, aunque se ha visto un aumento significativo en la comercialización. En abril, se alcanzó un récord de 90 millones de euros en ventas de vino en la región, algo sin precedentes.

Martínez Lizán destacó el esfuerzo de los viticultores en el campo y el trabajo conjunto con enólogos, bodegueros y cooperativas para producir vinos de alta calidad. Se espera que la implementación de medidas como los proyectos 'Vinati' y las inversiones en bodegas y cooperativas sigan mejorando el sector vitivinícola en la región.

En cuanto a las inversiones en bodegas, se aprobarán 42 expedientes para la modernización, con un respaldo económico importante. Desde que Emiliano García-Page es presidente en Castilla-La Mancha, se han aprobado un total de 388 expedientes de mejora, con una inversión de 364 millones de euros.

En relación con la próxima campaña vitivinícola, Martínez Lizán señaló que las previsiones apuntan a una cosecha normalizada de alrededor de 24 o 25 millones de hectolitros. Aunque destacó la buena climatología reciente, también mencionó posibles desafíos como enfermedades o daños por pedrisco que podrían afectar la producción.

El consejero expresó su preocupación por la posible sustitución de viñedos por almendros o pistachos, aunque confía en que esta dinámica se estabilice. Destacó la importancia del sector vitivinícola en la región, que históricamente ha sido un pilar económico clave.

El Comité Regional Vitivinícola abordará diversos temas, incluyendo la situación del cultivo, el desarrollo de la futura Interprofesional Vitivinícola de Castilla-La Mancha y la modificación del pliego de la IGP 'Vinos de la Tierra de Castilla'. Se espera que estas discusiones contribuyan a fortalecer y organizar de manera más eficaz el sector vitivinícola.