TOLEDO, 15 Jun.
Castilla-La Mancha cuenta para esta novedosa temporada con un total de 35 zonas oficiales de baño de interior, que corresponden a 21 ayuntamientos y también incorporadas en las demarcaciones hidrográficas del Júcar, Tajo, Guadiana y Guadalquivir.
Como opción alternativa a otros sitios, la Comunidad Autónoma proporciona de este modo espacios habilitados y controlados sanitariamente donde se puede gozar de la naturaleza y de rincones relajados de enorme hermosura, con una amplia red de playas y zonas de baño continentales, informó la Junta en publicación oficial.
Por provincias, en Albacete se administran ocho zonas de baño, correspondiendo siete a las lagunas del ayuntamiento de Ossa de Montiel dentro en las Lagunas de Ruidera (Laguna 'la Colgada', 'la Salvadora', 'la Tomilla', 'la Santos Morcillo', 'la Redondilla' y ámbas de San Pedro) y una en el Río Júcar, en el concejo de Alcalá del Júcar.
En Ciudad Real, se observan nueve zonas de baño en conjunto, encontrándose cinco en el Río Bullaque (tres corresponden al concejo de Piedrabuena y 2 en el ayuntamiento de El Robledo); una en el Pantano de Carboneras, en el ayuntamiento de Brazatortas, y tres zonas de baño en Ruidera, en el Parque Natural de Las Lagunas de Ruidera (Laguna del Rey, Entrelagos y 'la Morenilla').
En la provincia de Cuenca se inspeccionan siete zonas de baño, el Embalse de Buendía, con 2 zonas de baño (las dos en Buendía); el Río Guadiela (Albendea); la Laguna del Tobar (Beteta); el Río Escabas (Cañamares); el Embalse de la Toba (Cuenca) y el Río Cuervo (Santa María del Val).
En Guadalajara se reúnen un total de siete zonas de aguas de baño, 2 en el Río Tajo (Trillo y Zaorejas); tres en el Embalse de Entrepeñas (Alocén, Durón y Pareja); una en el Embalse de Alcorlo (La Toba) y una en el Embalse de Pálmaces de Jadraque.
La provincia de Toledo tiene 4 zonas de baño, tres en las Lagunas de Villafranca de los Caballeros y una en el Embalse de Cazalegas.
Para resguardar la salud de la gente usuarias de las ubicaciones de baño, la Consejería de Sanidad, mediante la Dirección General de Salud Pública, hace un Programa Regional de Vigilancia Sanitaria de las Aguas de Uso Recreativo, creado por las partes causantes de Salud Ambiental y los Distritos de Salud.
Este programa deja el control de la calidad de las aguas, las instalaciones y sus ámbitos. La supervisión de estos espacios está basada esencialmente en la inspección ocular de la playa y el agua, tal como la toma de muestras del agua de las ubicaciones de baño para revisar su calidad.
A partir de estos datos, la Consejería de Sanidad emite reportes sobre la aptitud de baño de las aguas, con una periodicidad quincenal hasta el momento en que termine la temporada de baño, el 15 de septiembre.
Entre los análisis de las aguas de baño se determinan, en internet de Laboratorios de Salud Pública, todos y cada uno de los factores microbiológicos demandados por la normativa vigente.
Además, se observan otros factores biológicos como cianobacterias, microcistinas y la presencia del virus Severe Acute Respiratory Syndrome Coronavirus (SARSCoV2) causante de la Covid-19, siendo Castilla-La Mancha la única Comunidad Autónoma que efectúa estos últimos análisis, que se estudian en las partes de Salud Ambiental y Microbiología Clínica y Ambiental del Instituto de Ciencias de la Salud de Talavera de la Reina.
Para entender el estado de estos espacios, la gente con intereses tienen la posibilidad de entrar al sistema nacional de información sanitaria 'NÁYADE' (http://nayadeciudadano.sanidad.gob.es/) y de el sitio web Sanidad Castilla-La Mancha (https://sanidad.castillalamancha.es/ciudadanos).
Coincidiendo con el comienzo de la temporada, la Consejería de Sanidad sugiere a la ciudadanía respetar la señalización que existe, tal como cuantas advertencias de observación, anuncios y riesgos que estén instaladas en estos rincones.
Se recomienda tomar en consideración la hondura de las ubicaciones de baño, puesto que puede cambiar de un día a otro, con lo que resulta conveniente revisar la distancia en el fondo y que no haya elementos sumergidos, así como piedras, árboles, ramas u otros elementos.
Además, es esencial no olvidar que las especificaciones y activa fluvial de estos espacios naturales tienen la posibilidad de ocasionar que el fondo en ocasiones sea desequilibrado o que se creen surcos o pozas de hondura y accionar irreconocible.
Ante crecidas del caudal de un río, o si la agilidad de la corriente incrementa, es conveniente eludir el baño.
La Consejería ten en cuenta que los municipios son los responsables de sostener las condiciones de limpieza y salubridad de las playas de las ubicaciones de baño, poner avisos informativos con las peculiaridades, infraestructuras y cuestiones de inseguridad, tal como controlar los probables puntos de vertido próximo para eludir peligros y adoptar las medidas de administración que le requieran las gestiones de salud ambiental.