TOLEDO, 14 Mar.

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, Antonio Yáñez, ha recordado que las reglas que regulan el trasvase Tajo-Segura deberán actualizarse para amoldarse a las novedosas premisas contempladas en el nuevo Plan Hidrológico del Tajo antes que transcurran 12 meses tras su aprobación, algo que va a ocurrir en el mes de febrero de 2024.

A cuestiones de los medios tras una rueda de prensa, ha recalcado que las presentes reglas están en enfrentamiento con el nuevo Real Decreto, con lo que hay que alterarla y se dan "12 meses para solventarlo".

También ha aprovechado para rememorar que los caudales mínimos que marca el nuevo plan "son mínimos, no medios", con lo que espera que vayan en alza.

En otro orden de cosas, Antonio Yáñez, ha apuntado que el 80% de las masas de agua del río Tajo no muestran un óptimo estado, y terminar con este radical pertence a los objetivos escenciales de la novedosa planificación hidrológica para hallar un curso del río "eficaz y racional lo máximo viable".

Para contrarrestar esta problemática, ha recordado que se sugieren mucho más de 600 actuaciones con una inversión de 3.700 millones de euros en el nuevo Plan del Tajo, cien de los que se dividen en 40 actuaciones para revertir el estado hidromorfológico.

Según dijo, una sección esencial de estas actuaciones se enfoca en el eje del Tajo, "de los que mucho más padecen" y que afectan a Toledo y Talavera de la Reina.

También se pronounció frente a la aparición de espumas en el río Tajo, que puede contestar desde a polución puntual hasta a cambios de temperatura radicales.

Dentro de los 3.700 millones de euros a establecer, el 55% van destinadas a depuración de aguas, y en el total, hay una medida fundamental, la actuación de tres depuradoras en el sur de Madrid con mucho más de mil millones de euros.

Esta primordial medida, ha precisado, podría achicar esta clase de visualizaciones de espumas una vez entren en desempeño.