TOLEDO, 27 Feb.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado la "agresión" que padeció una facultativa el pasado viernes de madrugada en el hospital de Mora (Toledo) por la parte del padre de una tolerante, que la arrinconó en la solicitud y la conminó pese a transmitirle que se encontraba embarazada.
En publicación oficial, CSIF informó que una tolerante asistió al hospital con su hermana y, "de malas formas, mostró su conflicto por el régimen que prescribió la facultativa".
"Veinte minutos después se presentó el padre de la tolerante, que con chillidos y una actitud beligerante le levantó la mano en ademán de agredirla físicamente, la acorraló en la solicitud y le ha dicho 'te enterarás'".
Según cuenta CSIF, en ese momento, la médico le comunicó que se encontraba embarazada y que por favor tratara de tranquilizarse.
"En sitio de deponer su actitud beligerante, el padre de la tolerante continuó chillando y conminando a la médico, que fue auxiliada por una enfermera, instante en el que aprovechó para huír de la solicitud y asistir a la región de administración para llamar al 112. En ese instante, el atacante se fue del centro".
Tras reportar que la médico como la enfermera han anunciado demanda, la central sindical volvió a reclamar la dotación de supervisión en todos y cada uno de los centros de salud, frente "la desprotección de los expertos".
La semana anterior, CSIF denunciaba otra agresión en Villaluenga de la Sagra (Toledo), que se aúna a las asimismo recientes del hospital de Buenavista (Toledo) y Añover de Tajo.
"Es obvio que el Sescam debe accionar, no ha convocado el Comité regional de Seguridad y Salud Laboral, que transporta sin reunirse desde noviembre de 2021. Contar seguramente en los centros es bien simple y llanamente una cuestión económica, llevarlo a cabo sí que sería una política de acompañamiento a la Atención Principal. El resto es papel mojado", concluyeron.