La representante del Gobierno, Ximo Puig, Guillermo Fernández Vara y Patxi López, los mucho más críticos con el presidente de Castilla La Mancha
MADRID/TOLEDO, 20 Sep.
Varios cargos del PSOE y el Gobierno han rechazado las afirmaciones del presidente de Castilla la Mancha, Emiliano García Page, por criticar la política de acuerdos del Ejecutivo y su estrategia en oposición al líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo. Solamente entre los barones socialistas, el aragonés Javier Lambán, se ha salido del alegato oficial al sugerir que se le quite relevancia a la polémica.
Otros cargos socialistas como el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, el de Extremadura, Guillermo Fernández Vara y el representante del PSOE en el Congreso, Patxi López, han recriminado con aproximadamente vehemencia las expresiones de García Page.
El líder de los socialistas de Castilla La Mancha aseveró en una entrevista publicada este lunes que tiene un óptimo término en lo político y personalmente de Feijóo, no comparte ni se identifica con el título de "insolvente" y no lo considera acertado.
De este modo, mostró su conflicto con el mensaje primordial del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el enfrentamiento que sostuvo con el presidente del PP en el Senado a inicios de mes. Además, Page puso en cuestión las "compañías" del Ejecutivo en referencia a sus asociados y rechazó que en este momento se ataque a las compañías en el momento en que hasta recientemente se les ponía la alfombra roja.
Así, la representante del Gobierno, Isabel Rodríguez, --que como Page es de Castilla La Mancha-- volvió a acusar este martes al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo de insolvencia, reafirmando de esta manera el mensaje del Gobierno en contra suya. "O hablamos de insolvencia o de mala fe", aseguró, al paso que ha apuntado que elige meditar que es lo primero pues tendría antídoto, pero lo segundo tiene "mal arreglo".
Al ser preguntada sobre este tema, Rodríguez evitó realizar mucho más comentarios sobre las expresiones de Page. "No tengo nada que decir, son sus afirmaciones y sus expresiones y se encarga de exactamente las mismas", indicó. Sin embargo, fuentes de Moncloa precisaron que suponen que no estuvo acertado, y solo le hallan explicación en su carácter personal. "Él es de esta manera", señalan.
El representante del PSOE en el Congreso y exlehendakari, Patxi López asimismo contestó a Page al apuntar que no se está en el Gobierno para "estar cómodo" sino más bien para ofrecer resoluciones a los inconvenientes de la ciudadanía y que, si el PSOE ha pactado con Bildu temas como la subida de las pensiones o la creación del ingreso mínimo escencial, fué pues el PP se ha negado a respaldar esas medidas.
Respondía de esta manera a la observación lanzada por el líder del PSOE español-manchego sobre las "malas compañías" del Gobierno, en referencia a sus asociados parlamentarios nacionalistas y también independentistas.
"Ciertos aseguran que nos castigan las amistades peligrosas, pero a un Gobierno se le castiga por no gobernar, no por asumir su compromiso y ofrecer respuestas a los inconvenientes de los ciudadanos que es lo que hace este Gobierno", enfatizó López sin que absolutamente nadie le preguntara por García Page.
El único que mostró indulgencia con su compañero de partido fué Javier Lambán, que ha sugerido "eliminar hierro y no sacar de contexto" sus declaraciones. Así, ha sostenido que el PSOE jamás fué "un tribunal de la Inquisición" y de ahí que milita en él, mientras que ha pedido "no ayudar a dar de comer mucho más la polémica", y ha rechazando las "conclusiones equivocadas" sobre las afirmaciones de Page.
Asimismo, el presidente de Aragón --al lado de Page entre los mucho más críticos con Pedro Sánchez-- ha aseverado que "el PSOE es una maquinaria política y electoral que está engrasándose para los próximos retos y, a la cabeza de todos, peleando por las victorias socialistas, va a estar García-Page".
Por el opuesto, el valenciano Ximo Puig indicó que "hay que procurar ser congruente" y le ha recordado que en el Consejo Político Federal que el pasado sábado festejó el PSOE hubo un convenio "popularizado" en relación a un plan política.
Al ser preguntado sobre si comprende las críticas emitidas por Page, Puig ha señalado que no está para comentar las declaraciones de otros presidentes pero que "hay un valor primordial que es la congruencia", ha apostillado.
En exactamente la misma línea, Fernández Vara, asimismo se ha posicionado contra Page al apuntar que "uno no puede ser leal a España si no le resulta leal a su emprendimiento". Además, indicó que producir "confusión, enfrentamiento y división interna" no lleva a nada y no es bueno para el país, según ha sostenido.
En tono mucho más conciliador se expresó el líder de los socialistas vascos, Eneko Andueza, que aseguró respetar "mucho" la opinión de sus compañeros de partido y que las citadas afirmaciones ponen de manifiesto que cualquier componente o responsable orgánico puede expresarse con total independencia. En todo caso, ha señalado que él se queda con "el tiempo de unidad y trabajo" que se vivió el pasado sábado en Zaragoza.
