TOLEDO, 29 Ago.
Adelanta que su departamento prevé subir la semana próxima al Consejo de Gobierno para su aprobación el límite de gasto no financiero
El asesor de Hacienda y Administraciones Públicas del Gobierno de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha adelantado que el techo de gasto de la Comunidad Autónoma rondará para el año próximo los 7.500 millones de euros, una cuantía que incluirá las subvenciones de carácter finalista y los fondos de restauración.
Tras reunirse con el presidente regional, Emiliano García-Page, Ruiz Molina explicó que "hablamos de unos capitales hechos desde el rigor presupuestario que debe continuar atendiendo a los campos productivos".
"El rigor y la compromiso con las finanzas públicas, tal como el cumplimiento con todos y cada uno de los compromisos comprados con los ciudadanos de la zona, van a ser los objetivos del techo de gasto", aseguró el encargado de Hacienda, que ha añadido que las cuentas del 2023 van a tener como prioridad proseguir atendiendo las pretensiones del tejido productivo, de las familias y de los ámbitos mucho más atacables.
De igual modo, según informó en publicación oficial el Consistorio, ha adelantado que su departamento prevé subir la semana próxima al Consejo de Gobierno para su aprobación el límite de gasto no financiero del año 2023.
"Pese a ser año electoral, en las finanzas públicas va a primar el rigor y la compromiso" explicó Ruiz Molina, que ha añadido que entre las primordiales especificaciones del techo de gasto va a ser "una reducción esencial de nuestra apelación al endeudamiento".
"A sabiendas de que las reglas fiscales en la Unión Europea están suspendidas, teníamos una recomendación de que las comunidades autónomas no superáramos en 2023 un déficit del 0,3 por ciento del PIB", ha añadido.
El titular de Hacienda y Administraciones Públicas ha añadido que el Gobierno de Castilla-La Mancha se marcha a ajustar al porcentaje que aconsejó la ministra María Jesús Montero en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera. De este modo, con relación a 2022, "la reducción de nuestra apelación al endeudamiento será del 70 por ciento", ha puntualizado Ruiz Molina.
El asesor ha insistido en que las primordiales especificaciones del techo de gasto y de los Presupuestos para el próximo ejercicio van a ser el rigor, la prudencia y el cumplimiento de los compromisos comprados con la ciudadanía, aparte de sostener la congelación de la presión fiscal "para seguir siendo entre las comunidades autónomas con menor carga impositiva".
PRIORIDADES DE LOS PRESUPUESTOS DE CASTILLA-LA MANCHA PARA 2023
También, el asesor Ruiz Molina informó al presidente García-Page de las asambleas que está sosteniendo con las distintas consejerías para concretar los Presupuestos de 2023 y el reparto del techo de gasto, que es el límite máximo de gasto en el que se puede incurrir, y al que hay que sumar las subvenciones de carácter finalista que se marchan a recibir por la parte del Estado y los fondos de restauración.
En este contexto, ha precisado que las preferencias para el año próximo van a ser proseguir atendiendo las pretensiones del tejido productivo, las familias y los ámbitos mucho más atacables, tal como proseguir haciendo más fuerte los servicios públicos escenciales, atender la transición ecológica y la transformación digital y realizar en oposición al reto demográfico.
"Deseamos que el Presupuesto de 2023, que cierra el segundo período de los ocho años de Gobierno de Emiliano García-Page, continúe siendo el primordial instrumento para la creación de riqueza y empleo", ha concluido el asesor.