El arqueólogo Santiago David Domínguez publica en 'Journal of Archaeological Science: Reports' un terminado estudio sobre los trabajos desarrollados
CUENCA, 26 Jun.
El yacimiento arqueológico de El Pino, ubicado en la ciudad conquense de Carrascosa del Campo, ha saltado al mapa en todo el mundo tras la publicación de un riguroso trabajo del arqueólogo Santiago David Domínguez en el que se pudo probar para qué exactamente utilizaban las herramientas el homo antecessor y que fueron datadas en hace un millón de años.
En un reportaje con Europa Press, Domínguez ha recordado de qué manera estuvo haciendo un trabajo en tal yacimiento desde el año 2012-2013, en donde se han hallado, entre otros muchos, instrumentos de piedra hechos en cuarcita y que, merced a la datación llevada a cabo por el Centro Nacional de Investigación de La Evolución Humana (CENIEH) y la Universidad Complutense de Madrid, se han logrado datar su antigüedad cerca de un millón de años.
Además de esto, merced a la buena conservación que tenían estos instrumentos, el aparato del doctor Ignacio Martín Lerma de la Universidad de Murcia ha realizado una investigación de laboratorio de las piezas. Allí, los filos de estos instrumentos fueron examinados con microscopio y se logró entender para qué exactamente empleaban estas herramientas.
"Es una sorpresa y un tesoro", enseña Domínguez, en tanto que en herramientas tan viejas era muy difícil saber estos usos. "Pudimos entender que estas lajas de piedra habían sido usadas para carnicería, y otros elementos de mayor tamaño se emplearon para la carpintería", desgrana.
Por esta razón, a una parte de las herramientas que se encontraron en el yacimiento, se puede meditar que en esta época prehistórica se llegaron a crear utensilios de madera, que no llegaron hasta nuestros días.
Enmarcado en un emprendimiento que inspecciona el paleolítico inferior y medio en la provincia de Cuenca, la investigación de este yacimiento de La Mancha conquense puso de manifiesto la relevancia del Pino en el panorama nacional y también en todo el mundo y se ha posicionado como clave para el estudio de los primeros pobladores humanos en Europa.
De esta manera, "encaja a la perfección" en los alegatos que trazan yacimientos tan esenciales del país como las secuencias del Jarama y el Henares en el centro de la península, el yacimiento de Vallparadís en Cataluña, el de Orce en el sur de España y el de Atapuerca, en Burgos.
Además de esto, se están consiguiendo afines desenlaces por la parte del mismo aparato comandado por Domínguez en los términos municipales de Arcas, Canalejas del Arroyo y Huete, y que por ahora han ubicado al yacimiento de Carrascosa del Campo como de los mucho más viejos tanto de Castilla-La Mancha como de España.
Para hacer la publicación de este producto en la gaceta científica, el arqueólogo enseña que se ha debido hacer un "difícil" trabajo en el que se tuvieron que coordinar todas y cada una de las partes implicadas.
De ahí que, el producto científico tiene la firma del propio Domínguez como arqueólogo directivo de las excavaciones con 'HEROICA Arqueología y Patrimonio Cultural' y se tienen dentro la de los doctores Martín Lerma de la Universidad de Murcia como responsable del estudio de las huellas de empleo de las herramientas, tal como las de Davinia Moreno del CENIEH y Carlos Pérez Garrido, de la Universidad Complutense, como causantes de la datación de los estratos de sobra interés.
Si bien las campañas de excavación se llevaran a cabo entre 2014 y 2015, fué este 2022 en el momento en que todos y cada uno de los descubrimientos llegaron hasta la red social científica en todo el mundo, puesto que se tuvieron que probar todos y cada uno de los descubrimientos de manera científica y, "hasta el momento en que no se tiene todo a la perfección avalado, es imposible difundir ni a nivel científico ni en todo el mundo". "No fué una labor simple", reconoce.
En este momento que el producto ahora fué anunciado en la 'Journal of Archaeological Science: Reports', a nivel global se tiene una contestación "bastante buena". "En el final conseguimos poner a la provincia de Cuenca en el mapa del paleolítico, tal como al yacimiento del Pino en Carrascosa del Campo, y esto pertence a los puntos ahora indiscutibles y que si alguien no cita es por el hecho de que no hizo una aceptable investigación", afirma Domínguez.