ALBACETE, 16 Nov. - La Inspección de Trabajo ha confirmado la denuncia presentada por Comisiones Obreras contra Geacam después de que la empresa no incluyera la exposición a agentes tóxicos y cancerígenos en la evaluación de riesgos de los bomberos forestales.
Un informe realizado por la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Toledo respalda la denuncia, citando los estudios de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer y los del Ministerio de Transición Ecológica, los cuales reconocen la existencia de agentes tóxicos en el humo de los incendios forestales, como los hidrocarburos policíclicos y compuestos orgánicos volátiles, que podrían ser perjudiciales para la salud.
Además, el informe también destaca que en un incendio forestal no solo se emiten agentes químicos, sino también material sólido como cenizas y hollín, elementos a los que están expuestos los diferentes profesionales de los servicios de extinción de incendios forestales, incluyendo a técnicos, agentes medioambientales e ingenieros de la Junta.
Por tanto, Comisiones Obreras lleva años solicitando a Geacam que instale lavadoras en sus 103 instalaciones en Castilla-La Mancha, un compromiso que la empresa aún no ha cumplido. También exigen la creación de protocolos de prevención que tengan en cuenta la presencia de todos estos agentes tóxicos.
"Estamos buscando soluciones, hemos propuesto la instalación de lavadoras porque los bomberos forestales, después de los incendios, tenemos que llevarnos a casa todo el equipo contaminado. Esto no puede seguir así, necesitamos poder ir al centro de trabajo, lavar los equipos y poder ducharnos para eliminar las cenizas y el hollín", declaró Manuel Amores, presidente del Comité Intercentros de Geacam, en una rueda de prensa. Además, Amores también solicitó una mayor disponibilidad de equipos para los profesionales.
"Necesitamos que los trabajadores tengan dos o tres trajes de protección. En incendios que duran un día no hay problema, pero tenemos incendios que duran tres o cinco días e incluso semanas, lo que nos obliga a usar el mismo equipo sin descontaminar y llevarlo a casa", criticó Amores.
Amores también criticó a la empresa por afirmar que lavarían los equipos al final de cada temporada: "Es decir, han dicho que lavarían los equipos después de una campaña de cuatro meses con 12 o 13 incendios".
El sindicato CCOO pide a Geacam que siga el ejemplo de Andalucía, donde ya se ha incluido este problema en la evaluación de riesgos y se han realizado modificaciones.
Además, solicitan que se incluyan estos problemas en el Estatuto del Bombero Forestal porque consideran que el actual es "descafeinado". "Deben tomarse medidas acordes a las situaciones que vivimos. Todos los bomberos forestales de España deben tener los mismos derechos, ya que los tóxicos no entienden de límites geográficos", añadieron.
Por otra parte, Paco Villarta, presidente del Comité Intercentros Salud Laboral de Geacam, agradeció el trabajo de la Inspección y detalló el proceso para obtener el informe.
"En 2017, los representantes de prevención ya solicitaron una evaluación de riesgos, pero la empresa argumentó que no existía peligro alguno basándose en una medición realizada en la quema de montones, un estudio en el que no se contó con la representación sindical y que ha sido refutado por la Inspección de Trabajo", explicó Villarta.
Villarta señaló que lograron que la empresa instalara lavadoras, pero solo en 20 centros, por lo que insisten en que se adapten las instalaciones para instalar lavadoras y duchas en todos los centros.
Además, hizo un llamamiento al nuevo viceconsejero de Medio Ambiente, Pepe Almodóvar, para que se elabore un procedimiento de descontaminación consensuado de cara a la próxima temporada de incendios.
"CCOO obligará a Geacam a crear una comisión sobre los riesgos y a cumplir con los decretos sobre químicos y cancerígenos que han estado incumpliendo", concluyó.