El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, ha anunciado que se solicitará la declaración de zona catastrófica después de la devastación causada por la DANA. La medida permitirá iniciar los trabajos necesarios para restaurar la movilidad en las principales vías de la ciudad y restablecer los servicios esenciales.
En una conferencia de prensa, el alcalde también informó que su equipo ha aprobado la asignación de un millón de euros, el doble de lo invertido hace dos años durante la anterior DANA, para mitigar los daños ocasionados.
Después de una lluvia intensa de más de 90 litros por hora en la ciudad, la noche ha sido de arduo trabajo y ha habido numerosos incidentes. Por suerte, no se reportan víctimas gracias a la labor de la Guardia Civil, la Policía Nacional, la Policía Local, los Bomberos, la Protección Civil y los empleados municipales.
En estos momentos, más de 200 personas están trabajando para restaurar la normalidad en la ciudad, y múltiples empresas privadas se han ofrecido para ayudar al Ayuntamiento.
El servicio de autobús urbano sigue suspendido debido a que la base de la empresa en el Polígono ha sido severamente afectada por una riada del arroyo Ramabujas, lo que ha dejado a casi treinta autobuses inmovilizados.
El problema radica en que el punto de suministro de gas, el combustible utilizado por estos vehículos, se encuentra en la zona inundada. Actualmente se están buscando alternativas para resolver esta situación.