La cocina es una parte importante de la cultura e historia de cualquier lugar, y Castilla La Mancha no es la excepción. Esta región española es conocida por su gastronomía, siendo el queso manchego y el vino de La Mancha algunos de sus productos más destacados. Pero hoy, vamos a ahondar en la historia y literatura que ha influenciado la cocina manchega, en particular a través de la figura de Don Quijote.
La cocina manchega se caracteriza por ser una cocina de campo, donde predominan los productos locales y de temporada. La tradición de la comida rural se refleja en los platos típicos manchegos, como el asado de cordero, las migas o el pisto, todos ellos con un sabor robusto, pero sencillo.
Sin embargo, la influencia más destacada en la cocina manchega es la de los moriscos. Después de la Reconquista, muchos moriscos se quedaron en Castilla La Mancha y tuvieron una influencia duradera en la cocina regional. Por ejemplo, las berenjenas rellenas son una adaptación de un plato típico andaluz que fue introducido en la región por los moriscos.
Don Quijote de la Mancha es una obra literaria icónica, no solo para España, sino para todo el mundo. La obra de Miguel de Cervantes ha sido traducida a muchos idiomas y ha sido objeto de muchas interpretaciones y análisis. Una de las interpretaciones más fascinantes es la relación de la cocina manchega con la obra de Cervantes.
El asado de cordero es uno de los platos más icónicos de la cocina manchega, y aparece varias veces en la obra de Cervantes. En el capítulo VIII de la primera parte de la obra, la descripción del asado de cordero es particularmente detallada:
"Había cocido una olla de algo más de vaca que carnero, y hacía sazón con un buen puñado de arroz y seis pepinos que parecían mellizos; los cuales pepinos, cortados en ruedas, y puestos una fila encima de otra en el majado, parecían una guarnición de azulejos verdes y blancos puestos en hilera. El manjar aún en olla y abierto, aunque antes que lo abriesen olía alabastro."
La descripción del asado de cordero se caracteriza por los detalles, no solo del sabor, sino también cómo se presenta en la mesa.
Otro producto importante de la región es el vino de la Mancha, que aparece en varias ocasiones en la obra de Cervantes. En el capítulo VI de la segunda parte, Don Quijote y Sancho Panza discuten sobre la calidad del vino de la región:
"Este vino no tiene sabor a nada, porque nunca tuvo a su tiempo mosto: aguárdese, señor mío, que porque es joven tiene esta falta; que en sacándolo de las cubas, dará muestra de sí y sabrá mejor. Pero, pues vuesa merced desea hacer la experiencia deste, en cada pueblo hallaremos buenas bodegas donde suplan esta falta."
Esta conversación nos muestra la importancia del vino de la Mancha en la época, y también la importancia de la edad y la calidad en el mundo del vino.
La cocina manchega es una parte importante de la cultura de Castilla La Mancha, y ha sido influenciada por muchas culturas y épocas. Pero una de las influencias más duraderas en la cocina manchega es la obra de Cervantes, en particular Don Quijote. La obra de Cervantes no solo nos da detalles sobre la cocina manchega en la época, sino que también nos muestra la importancia de la comida y el vino en la época, y cómo estos elementos se relacionan con la identidad y la cultura.