Castilla La Mancha es una región llena de historia y cultura, con paisajes que han inspirado a grandes escritores y poetas a lo largo de los siglos. Si eres amante de la literatura, no puedes perderte las rutas literarias por Castilla La Mancha, que te llevarán por los pueblos y ciudades que vieron nacer y crecer a algunos de los escritores más importantes de la literatura española.
Si hay un autor que ha dejado huella en Castilla La Mancha, ese es Miguel de Cervantes. Su obra maestra, Don Quijote de la Mancha, es una de las más grandes de la literatura universal, y su protagonista ha dado nombre a una de las rutas más interesantes de la región.
La ruta de Don Quijote te llevará por los pueblos y ciudades que aparecen en la novela, como Alcalá de Henares, Argamasilla de Alba, El Toboso o Campo de Criptana. Podrás visitar las casas donde vivieron algunos de los personajes más famosos de la novela, como Dulcinea, Sancho Panza o el mismo Don Quijote, y conocer los lugares que inspiraron a Cervantes para escribir algunas de las escenas más memorables de su obra.
Alcalá de Henares es la ciudad natal de Miguel de Cervantes, y en ella podrás visitar su casa natal, que alberga un interesante museo sobre su vida y obra. También podrás recorrer el casco histórico de la ciudad, que está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y visitar la Universidad de Alcalá, donde estudió el autor de Don Quijote.
Argamasilla de Alba es el pueblo donde, según la novela, Don Quijote fue armado caballero. En este pueblo podrás visitar el Museo de la Casa de Medrano, donde se encuentra la celda donde supuestamente estuvo prisionero Cervantes y donde pudo escribir parte de su obra.
El Toboso es el pueblo donde vivía Dulcinea, la amada de Don Quijote. Aunque no se sabe con certeza qué casa perteneció a ese personaje, podrás visitar la Casa de Dulcinea, que es un museo dedicado a la figura de la mujer manchega.
El Lazarillo de Tormes es una de las obras más importantes de la literatura española, y es también una de las más representativas del género picaresco. Esta novela, publicada en el siglo XVI, relata las aventuras de Lázaro, un joven de origen humilde que se dedica a servir a distintos amos. La ruta del Lazarillo de Tormes te llevará por algunos de los lugares que aparecen en la novela, y te permitirá conocer mejor la vida en la Castilla del siglo XVI.
La ruta del Lazarillo comienza en Tormes, un pequeño pueblo situado junto al río del mismo nombre. En este pueblo podrás visitar el Castillo de los Duques de Alba, que aparece mencionado en la novela como la casa de uno de los amos de Lázaro.
Salamanca es una de las ciudades más bonitas de Castilla La Mancha, y es un lugar fundamental en la ruta del Lazarillo de Tormes. La novela comienza en esta ciudad, donde Lázaro nace y vive con su madre hasta que esta decide buscar trabajo en otro lugar. En Salamanca podrás visitar algunos de los edificios más importantes de la ciudad, como la Universidad, la Plaza Mayor o la Catedral, y perderse por las calles del casco histórico.
Azorín es uno de los escritores más importantes del siglo XX, y es un referente de la Generación del 98. Su obra está profundamente ligada a Castilla La Mancha, y en esta región encontrarás muchos lugares que le inspiraron para escribir sus libros.
Monóvar es el pueblo natal de Azorín, y en él podrás visitar su casa natal y el museo dedicado a su figura. Además, podrás dar un paseo por el casco histórico del pueblo, que conserva todavía gran parte de su encanto medieval.
Albacete es una de las ciudades más importantes de la región, y también una de las más interesantes para los amantes de la literatura. En ella podrás visitar la Catedral, el Museo de la Cuchillería o el Parque de los Jardinillos, uno de los lugares preferidos de Azorín para escribir.
Almansa es una ciudad situada en la comarca de las Sierras de Alcaraz y del Segura, y en ella podrás visitar el Castillo de Almansa, que fue escenario de una de las batallas más importantes del siglo XVIII. Este castillo aparece mencionado en muchas de las obras de Azorín, que lo consideraba uno de los monumentos más bonitos de la región.