TOLEDO, 11 de abril. En un significativo encuentro celebrado recientemente, delegados de 17 asociaciones agrícolas de diferentes regiones afectadas por el impacto de la fauna silvestre, y en particular por el creciente número de conejos, se reunieron con José Rubén Torres, delegado provincial de Desarrollo Sostenible, y Ángel Aurelio Martínez, jefe de servicio de Política Forestal y Espacios Naturales.
El encuentro también reunió a destacados miembros de las organizaciones agrarias, entre ellos, Blanca Corroto, presidenta de Asaja Toledo, Antonio Ruiz de COAG Santa Cruz de la Zarza, y Julián Morcillo, secretario general de UPA Castilla-La Mancha. La información se hizo pública a través de un comunicado emitido por las asociaciones participantes.
Durante la reunión, los agricultores expusieron las serias dificultades que enfrentan en sus explotaciones debido al aumento descontrolado de la población de conejos. Presentaron un conjunto de propuestas para abordar esta plaga, que representa una amenaza considerable para la próxima campaña agrícola, especialmente en lo que respecta a la vendimia, tras las recientes lluvias de primavera.
El delegado de Desarrollo Sostenible se mostró receptivo ante las preocupaciones planteadas y consideró positiva la creación de un grupo de trabajo conjunto. Dicha iniciativa tiene como objetivo evaluar la magnitud de los daños, identificar las zonas más afectadas y analizar la viabilidad de las medidas sugeridas. A su vez, se comprometió a llevar estas inquietudes a la atención de la Consejería de Desarrollo Sostenible.
Las asociaciones agrícolas, representativas de localidades como Corral de Almaguer, Lillo, Santa Cruz de la Zarza, La Puebla de Almoradiel, La Villa de Don Fadrique y Quero, junto con las organizaciones agrarias, presentaron un conjunto de propuestas que consideran "lógicas, razonadas y consensuadas" en colaboración con agricultores y cazadores de las áreas afectadas.
Dentro de las medidas sugeridas se incluye la adecuación de la condicionalidad de la Política Agraria Común (PAC) en relación con elementos del paisaje que los conejos utilizan como refugios; labores de limpieza y vallado de áreas sensibles, tales como acequias, ríos y lagunas; y la implementación de un control poblacional que contemple la caza nocturna (bajo permisos y supervisión) así como la captura con jaulas, opción ya explorada por la Administración en algunas reservas.
También se plantea la formación de brigadas de cazadores profesionales y biólogos, así como la posible ampliación de permisos de caza en las zonas más golpeadas. Asimismo, se sugiere la reducción de distancias de seguridad en áreas específicas, con un radio de actuación de hasta 100 metros, y la consideración de eliminar al conejo del listado de especies cinegéticas protegidas en las áreas clasificadas como emergencia cinegética.
Los representantes de las organizaciones agrarias recordaron que varias de las medidas sugeridas ya habían sido aprobadas en el pasado por el Gobierno regional para hacer frente a problemas de sobrepoblación de conejos en regiones críticas, lo que indica que su implementación debería ser factible en la actualidad.
Este encuentro representa el comienzo de una colaboración más estrecha con el nuevo delegado provincial de Desarrollo Sostenible, José Rubén Torres, a quien los agricultores expresaron su seria preocupación sobre el futuro de sus explotaciones. "La situación demanda una respuesta urgente, coordinada y dentro del marco legal, para asegurar la continuidad de la agricultura en Castilla-La Mancha", apuntaron.
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