En un reciente suceso que ha sacudido a la localidad de El Pedernoso, situada en la provincia de Cuenca, la Guardia Civil ha puesto en el punto de mira a cuatro individuos, quienes son sospechosos de haber perpetrado una estafa y falsificación de documentos en el ámbito de la venta de ajos.

La historia comenzó el año pasado, cuando los dueños de una empresa que se dedica al cultivo, procesamiento y comercialización de ajos decidieron alzar la voz tras sospechar que habían sido objeto de un fraude. Este engaño parecía involucrar a dos de sus propios socios, lo que desencadenó una serie de investigaciones a partir de la denuncia presentada por estos afectados.

Frente a esta situación, el Equipo Roca de la Compañía de la Guardia Civil en Tarancón asumió el reto de esclarecer los hechos denunciados. Este proceso se vio complicando debido a que los eventos que estaban bajo investigación databan de la campaña agrícola del año 2022, tal y como ha declarado la Guardia Civil en un comunicado oficial.

Las autoridades llevaron a cabo diversas gestiones y auditorías en empresas de la región que están involucradas en la gestión y comercialización de ajos, así como en aquellas cuyo enfoque principal son los transportes de productos agrícolas. Los resultados de estas inspecciones dieron lugar a la recolección de evidencias valiosas, incluyendo documentación detallada sobre las compras efectuadas durante la citada campaña.

Al estudiar la documentación, se detectó una cantidad considerable de transacciones de ajos que habían sido realizadas con cuatro empresas dedicadas a dicho comercio en diferentes localidades de La Mancha. Cabe destacar que quienes figuraban como vendedores en estas transacciones resultaron ser, desafortunadamente, los socios denunciados y dos de sus familiares.

La investigación permitió también identificar a la empresa encargada de trasladar el producto agrícola desde las fincas hasta las instalaciones de los almacenes destinados a la clasificación y comercialización de los ajos. Durante este proceso, se identificaron a varios conductores que habían participado en estas actividades de transporte, quienes estaban ligados a los hechos en cuestión.

Los investigados aprovecharon su posición como miembros de la sociedad que gestionaba los ajos para desviar el destino original de dichas mercancías. En lugar de dirigirse a su destino legítimo, enviaban este producto a distintas empresas dedicadas a la comercialización de ajos en la zona de La Mancha conquense. A fin de ocultar esta actividad, contaron con la colaboración de dos familiares, lo que complicaba aún más la situación.

Se estima que a lo largo de este fraude, más de 187 toneladas de ajos fueron desviadas, resultando en un beneficio que supera los 150.000 euros. Como consecuencia de estos hechos, la Guardia Civil ha llevado a cabo la investigación de cuatro personas cuyos rangos de edad oscilan entre 21 y 51 años; entre ellos, se hallan dos socios de la empresa supuestamente defraudada, quienes enfrentan acusaciones de estafa y falsificación de documentos.

Las diligencias de este caso han sido dirigidas por el Equipo Roca de la Compañía de la Guardia Civil de Tarancón. Tanto los investigados como las pruebas recogidas han sido puestas a disposición del Juzgado de Guardia de San Clemente para su debida consideración.