TOLEDO, 22 de octubre. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha expresado su opinión sobre la controvertida figura de Leire Díez, exmiembro del Partido Socialista. Según García-Page, sería conveniente que el PSOE considerara la posibilidad de interponer una querella contra ella y otros que, en su opinión, han estado involucrados en actividades ilícitas que afectan al partido.

Tras las acusaciones de la Fiscalía hacia Díez, quien supuestamente ha liderado acciones en contra de la UCO y la Fiscalía Anticorrupción, el presidente socialista se pronunció al respecto durante una rueda de prensa en Madrid. Aunque se mostró cauto al ofrecer consejos, sugirió que el PSOE podría clarificar su posición al actuar como parte acusadora en esta situación.

García-Page afirmó: "Deberíamos ser perjudicados en esta historia y, por lo tanto, denunciar a Leire Díez y a todos aquellos que han abusado de la condición de socialista". El presidente reconoció que muchos de los problemas actuales del PSOE podrían estar vinculados a individuos que recibieron premios o reconocimientos en las primarias internas del partido, aludiendo a cómo estas decisiones podían haber servido para enmascarar malas conductas.

El líder regional no mostró disposición a otorgar credibilidad a las declaraciones de Díez. "No tengo ninguna razón para creérselo, ni por su comportamiento ni por lo que está afirmando", enfatizó, dejando claro que en esta disputa había ciertas divisiones dentro del partido sobre a quién se puede confiar.

Ante la gravedad de las acusaciones, García-Page insistió: "Lo más adecuado sería que el Partido Socialista se querellara y diera respuesta a quienes afirman haber actuado en nombre del presidente del Gobierno y del propio PSOE para llevar a cabo lo que parecen ser actos ilegales". Reiteró que el interés del partido debería ser tomar una posición activa en este proceso para resolver las dudas que han emergido a raíz de este incidente.