ALBACETE, 4 de noviembre.
En un movimiento significativo por parte del Gobierno de Castilla-La Mancha, la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, se reunió este lunes en Letur, Albacete, con un grupo de trabajadoras sociales locales y de las áreas circundantes. El objetivo de esta reunión fue discutir las diversas necesidades sociales que han surgido a raíz de las devastadoras pérdidas personales y materiales provocadas por el reciente fenómeno meteorológico de gota fría, el cual ha afectado seriamente a la comunidad. Este encuentro sirvió además para coordinar las acciones y ayudas necesarias que se implementarán en esta crítica situación durante los días y semanas venideros.
La consejera enfatizó que, tras la atención inmediata brindada durante los primeros días del desastre, se llega a un momento crucial en el cual es vital evaluar tanto los daños como las necesidades reales de los ciudadanos, las cuales naturalmente se extenderán a lo largo del tiempo. Con la pronta retirada de los servicios de emergencia que fueron desplegados en la zona para atender la crisis inicial, es ahora cuando se debe prestar especial atención a las circunstancias que enfrentarán los afectados.
En este contexto, García Torijano subrayó la importancia de que se planifiquen medidas tanto a corto plazo como a medio y largo plazo, con el fin de acompañar a las familias en su esfuerzo por restablecer una cierta normalidad. La consejera reafirmó que todos los casos serán analizados por los servicios sociales, asegurando un tratamiento urgente para aquellos que se consideren prioritarios.
Durante los días previos a la reunión, diversas trabajadoras sociales se dedicaron a identificar y catalogar las distintas necesidades de las familias y ciudadanos afectados por esta catástrofe, según la información proporcionada por la Junta en un comunicado de prensa.
García Torijano también adelantó que el área de Bienestar Social del Gobierno regional tiene previsto implementar medidas sociales específicas y excepcionales tanto en Letur como en Mira, Cuenca, que también ha sufrido gravemente las consecuencias de la gota fría.
Estas acciones sociales serán integradas en los planes de recuperación que el Gobierno regional planea poner en marcha, con una perspectiva que se extiende hasta el año 2028. Estas iniciativas se implementarán de forma transversal en los municipios de Letur y Mira, abriendo la puerta a una variedad de herramientas y estrategias que favorecerán la recuperación de estas localidades.
Entre estas medidas se incluye la posibilidad para los ciudadanos de recibir información y comenzar la tramitación de ayudas a través de una oficina de atención centralizada, que se inaugurará en Letur a partir de este miércoles y en Mira en los días siguientes.
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