En medio de la devastación causada por el fuerte temporal en Cuenca y la Comunidad Valenciana, el pueblo de Garaballa ha logrado mantenerse a salvo gracias a su intrincada orografía, la cual ha evitado inundaciones en sus calles. Sin embargo, las lluvias han dejado a esta localidad sin su conexión directa a Valencia por carretera, ya que el río Ojos de Moya ha destruido el puente y los caminos que llevan a las huertas.

El alcalde de Garaballa, Juan Palomares, ha señalado que, a pesar de que no se han reportado casas dañadas, las lluvias han causado estragos en las huertas y han arrancado árboles. Palomares describe cómo una acequia se desbordó, algo que no había presenciado desde su infancia, y destaca que a pesar de que el nivel del río ha descendido, el agua llegó a la carretera la noche anterior.

Según el alcalde, en Garaballa llovió durante todo el día, con 42 litros por metro cuadrado por la mañana y una fuerte tormenta por la noche. El puente afectado es una vía crucial para la localidad, ya que por ahí circula el autobús que va de Cañete a Utiel y permite el acceso a Valencia, donde reside la mayoría de los habitantes de Garaballa.

Con este acceso dañado, la segunda opción sería ir por Landete, pero ese puente también se ha desplomado sobre el río Ojos de Moya. Otra alternativa para llegar a Valencia sería a través de Mira, pero la riada del municipio serrano más afectado por el temporal obstruye el paso. Por el momento, la única vía desde Valencia a Garaballa es por Carboneras de Guadazaón.

Por otro lado, la comunicación con Cuenca y Madrid se mantiene intacta. Garaballa no ha tenido problemas con el suministro de agua, que llega desde el Pico de Ramera a través de una tubería que no sufrió daños durante el temporal.

El Ayuntamiento ha emitido un comunicado para informar a los 71 residentes de invierno de la situación en Garaballa, instándolos a reportar cualquier daño personal o material. A pesar de que hasta el momento no se ha reportado ninguna inundación en las viviendas, el pueblo solicitará la declaración de Zona Gravemente Afectada para poder reparar los daños causados en el puente.