La Policía Nacional ha desmantelado la estructura de financiación de la banda juvenil de los Trinitarios, que ha defraudado más de 700.000 euros, y ha detenido a 40 personas acusadas de varios delitos entre ellos, pertenencia a organización criminal, estafa bancaria, falsificación documental, usurpación de identidad y blanqueo de capitales.

Según informes recientes, la Policía ha llevado a cabo 13 registros domiciliarios en Madrid, Sevilla y Guadalajara, confiscando múltiples dispositivos informáticos, herramientas para abrir puertas, cerraduras, dinero en efectivo y literatura relacionada con el grupo.

Dentro de la organización criminal, figuran dos hackers encargados de cometer estafas bancarias usando las técnicas de phishing y smishing para luego pagar los honorarios de los abogados de los miembros en prisión, comprar drogas para la reventa y adquirir criptoactivos que luego se intercambiaban en la wallet de uno de los miembros que controlaba la cartera virtual como "caja común".

La detención de estas 40 personas representa un gran éxito en la lucha contra el crimen organizado y envía un mensaje fuerte y claro a aquellos que intentan defraudar a instituciones financieras y a la sociedad en general.