El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha expresado su poca atención al debate de investidura de Alberto Núñez Feijóo, aunque ha destacado su interés en lo que se ha llamado el "no debate", refiriéndose a las negociaciones en curso sobre una posible amnistía a los involucrados en el proceso independentista catalán.
García-Page ha respondido a los medios de comunicación durante su visita a Fernán Caballero, en la provincia de Ciudad Real, donde inauguró la modernización de los regadíos del embalse de Gasset. En relación a las demandas independentistas de un referéndum, el presidente ha señalado que no es algo nuevo, ya que "lo han estado pidiendo todo el tiempo".
"El problema no es ser independentista, porque se puede pedir y eso es legítimo, el problema es saltarse la Constitución y las leyes. Son delincuentes constitucionales", afirmó García-Page.
Por otro lado, el presidente castellanomanchego restó importancia al hecho de que fuera el exalcalde de Valladolid, Óscar Puente, y no el presidente en funciones, Pedro Sánchez, quien replicara a Alberto Núñez Feijóo en el debate de investidura.
García-Page recordó que Sánchez será el candidato en la próxima investidura en caso de que la de Feijóo fracase y afirmó que "su momento viene después". En sus palabras, "eso no tiene vuelta de hoja".