CUENCA, 16 de junio. Las intensas tormentas registradas el domingo pasado en la provincia de Cuenca han originado tres eventos de emergencia, destacándose dos rescates de personas que quedaron atrapadas debido a la repentina crecida de los ríos en la localidad de Arcos de la Sierra.

Alfonso, administrador del grupo de Facebook ‘Arcos de la Sierra’, compartió su experiencia de uno de estos incidentes, donde su vehículo quedó atrapado por las aguas desbordadas del río Trabaque. La situación se volvió crítica, lo que llevó a que varios vecinos se unieran para ayudar a quienes se encontraban en apuros.

A partir de las ocho de la noche, las tormentas empezaron a intensificarse, generando una situación sin precedentes, como relató Alfonso en una entrevista con Europa Press: "No habíamos visto algo así ni en las fuertes lluvias pasadas".

El primer suceso alarmante ocurrió cerca de las 11:50 de la noche en el Puente Vadillo, que cruza un pequeño arroyo afluente del Trabaque. El torrente de agua superó los 40 metros de ancho y varios metros de altura, dejando atrapado un vehículo que fue rescatado por valientes vecinos de la comunidad, quienes utilizaron una grúa para ayudar.

En otro incidente, la crecida del Trabaque alcanzó un impresionante ancho de más de 90 metros justo encima del puente del Molinillo. "Podría estar subestimando", comentó Alfonso, quien quedó atrapado junto a un pasajero hasta que finalmente logró salir marcha atrás, desviándose a través de campos aledaños al río.

La tormenta también afectó a dos residentes de Arcos de la Sierra que buscaban refugio en una pequeña caseta de huertos, la cual se encontraba en peligro por el desbordamiento del río y la inminente llegada de barro. El hijo de uno de ellos dio la alarma al servicio de emergencias 112, pero fue el propio alcalde de Arcos de la Sierra quien intervino para llevar a cabo el rescate utilizando su propio vehículo.

Ya hacia la 1:43 de la madrugada, equipos de maquinaria pesada comenzaron a limpiar de lodo la carretera que conduce al Puente Vadillo, con el objetivo de restablecer el acceso a Arcos de la Sierra, que había quedado incomunicado a raíz de estas emergencias.