Madrid/Toledo, 7 de agosto - En Castilla-La Mancha, el primer semestre del año ha sido trágico en términos de accidentes laborales, con 21 personas fallecidas, según los últimos datos provisionales proporcionados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.

De las muertes registradas, 17 ocurrieron durante la jornada laboral, mientras que las otras cuatro se dieron en accidentes in itinere, es decir, en desplazamientos hacia o desde el trabajo.

En total, se contabilizaron 12.131 accidentes laborales durante la jornada, de los cuales, además de los 17 mortales, hubo 12.023 clasificados como leves y 91 considerados graves.

Respecto a los accidentes in itinere, el número total asciende a 1.022, de los cuales 1.011 fueron leves, 7 graves y, lamentablemente, 4 resultaron mortales.

A nivel nacional, el Ministerio informa que 363 trabajadores perdieron la vida en accidentes laborales en los primeros seis meses del año, lo que representa un ligero aumento de tres fallecimientos en comparación con el mismo periodo de 2024, lo que equivale a un incremento relativo del 0,8%.

Aunque los accidentes mortales en jornada laboral han mostrado una ligera disminución en junio con 295 fallecidos —cuatro menos que en el mismo mes de 2024—, los siniestros in itinere con resultado de muerte han experimentado un aumento, alcanzando un total de 68 fallecidos, siete más que en el mismo periodo del año anterior.

Las estadísticas revelan que las principales causas de los accidentes mortales durante el primer semestre se deben a infartos y derrames cerebrales con un total de 126 muertes, seguidos por golpes ocasionados por caídas (49), accidentes de tráfico (39), y situaciones donde los trabajadores quedaron atrapados, aplastados o sufrieron amputaciones (39).

El sector servicios ha sido el más afectado, con 133 muertes registradas, lo que supone una disminución de 21 fallecidos comparado con el año anterior. En contraste, el sector de la construcción ha visto un repunte, con 87 muertes, 17 más que en 2024, mientras que en la industria y el sector agrario se mantuvieron con cifras similares, reportando 48 y 27 fallecidos, respectivamente.

El índice de incidencia de los accidentes mortales ha mostrado un descenso del 3,2% hasta junio, con caídas significativas en servicios del 15,3%, en el sector agrario del 1,4% y en la industria del 1,5%. Sin embargo, el sector de la construcción registró un alarmante aumento del 21,3% en su índice de mortalidad.

En total, de los 363 accidentes mortales documentados hasta junio, 334 eran trabajadores asalariados, tres más que el mismo periodo del año anterior, mientras que 29 eran autónomos, cifra idéntica a la del año pasado.

Los accidentes que han resultado en bajas laborales han disminuido un 2,7% en los primeros seis meses del año, sumando un total de 298.418. De estos, 256.071 ocurrieron en el lugar de trabajo (-3,1%) y 42.339 durante los desplazamientos in itinere, con un leve retroceso del 0,1% interanual.

Según las estadísticas, los accidentes graves durante la jornada laboral alcanzaron un total de 1.800 hasta mayo, lo que representa una disminución del 1,3%. En cuanto a los accidentes in itinere de gravedad, estos han disminuido en un 13%, ascendiendo a 435.

Por último, los accidentes leves durante la jornada laboral también han bajado un 3,1%, sumando 253.976, mientras que los siniestros in itinere clasificados como leves han aumentado un 0,1%, alcanzando un total de 41.836.

Los trabajadores por cuenta propia han sufrido 13.688 accidentes laborales con baja hasta junio, un descenso del 15,1% en comparación con el mismo periodo de 2024, con 12.703 accidentes en jornada de trabajo (-15,7%) y 985 in itinere, con una disminución del 5,5%.