CIUDAD REAL, 5 de agosto. En un lamentable suceso ocurrido en Ciudad Real, las instituciones locales han expresado su profunda preocupación y rechazo ante un ataque violento que sufrió una médica en el Punto de Atención Continuada (PAC) de la calle Pío XII.

El Ayuntamiento, junto con los Colegios de Médicos y Enfermería, ha emitido un comunicado en el que se muestra una “condena rotunda” hacia esta “gravisima agresión” perpetrada contra una profesional de la salud que solo se encontraba cumpliendo con sus obligaciones laborales. Este hecho resalta la creciente inseguridad que enfrentan los trabajadores del ámbito sanitario.

La agresión, acaecida durante la noche, se describe como un ataque físico y verbal inaceptable. Según lo indicado en el comunicado, la doctora agredida estaba siguiendo los protocolos establecidos cuando fue atacada, lo que pone de manifiesto la necesidad urgente de proteger a los profesionales que cuidan la salud de la población.

El Ayuntamiento ha expresado su total apoyo a la médica agredida, manifestando su compromiso de colaborar en las medidas necesarias para prevenir futuras incidencias de este tipo. “Es fundamental que Ciudad Real se convierta en un lugar seguro para todos los que trabajan en la atención sanitaria. No podemos permitir justificaciones para la violencia”, se afirma en el comunicado.

Por su parte, el Colegio de Médicos de Ciudad Real ha mostrado su “firme y absoluta” condena a la agresión, explicando que el ataque ocurrió tras la llegada de varias mujeres al centro, quienes exigían urgentemente una prueba diagnóstica. Ante la solicitud, la médica expuso la necesidad de un reconocimiento previo, siendo en ese instante cuando fue agredida de forma violenta.

El Colegio ha ofrecido apoyo legal inmediato a la facultativa, reafirmando su solidaridad con ella en este difícil momento. Además, han reiterado la importancia de implementar medidas de seguridad más efectivas en los centros sanitarios, enfatizando que la integridad de los profesionales de la salud debe ser prioritaria.

Asimismo, se ha recordado que tales agresiones están clasificadas como un delito de atentado contra la autoridad, animando a los profesionales de la salud a reportar cualquier ataque que sufran en el ejercicio de sus deberes. “Es vital que se denuncien estos hechos deplorables”, instan desde el Colegio de Médicos.

Finalmente, el Colegio Oficial de Enfermería de Ciudad Real también ha manifestado su condena frente a este ataque y ha mostrado su solidaridad con la médica agredida, ofreciendo asistencia y apoyo en lo que necesite. Han alertado sobre la gravedad del problema de la violencia hacia el personal sanitario, subrayando que cada incidente socava la dignidad del trabajo en el ámbito público.

Este nuevo caso de agresión, que se suma a otros recientes en la provincia, subraya la imperiosa necesidad de reforzar las medidas de protección para los trabajadores en el sector de la salud, exigiendo una respuesta decisiva tanto de las autoridades como de la sociedad en su conjunto.