ALBACETE, 30 de junio. En un firme compromiso con las pequeñas localidades, la Diputación de Albacete ha puesto en marcha dos iniciativas con un presupuesto de un millón de euros cada una, dirigidas a los municipios que cuentan con menos de 5.000 habitantes. Estas ayudas están diseñadas para ser solicitadas entre el 1 y el 20 de julio, en un esfuerzo por gestionar la afluencia de visitantes que se produce en la época estival.

El presidente de la Diputación, Santi Cabañero, ha precisado que la primera de las ayudas está orientada a la contratación de personal y empresas para el cuidado y mantenimiento de los espacios públicos, mientras que la segunda se centra en fomentar la celebración de festividades locales, vitales para la vida comunitaria.

Cabañero ha enfatizado la importancia de estas ayudas, afirmando que "somos conscientes de que durante el verano nuestras localidades se ven incrementadas en número de habitantes, lo que genera nuevas necesidades". Esta iniciativa alcanzará a los 79 municipios de la provincia que tienen menos de 5.000 residentes, así como a la localidad de Aguas Nuevas.

El presidente ha añadido que es esencial llevar a cabo un refuerzo en el mantenimiento de servicios, lo que implica la contratación de personal autónomo y un impulso al equipo existente en los ayuntamientos. Cabe destacar que solo se exigirá un 10% de cofinanciación a los municipios, y la Diputación se encargará de adelantar los fondos para facilitar la gestión del proceso por parte de las entidades locales.

El vicepresidente provincial, Fran Valera, ha explicado que esta propuesta se alinea con la visión de la Diputación, que sostiene que los municipios, además de ser lugares de esparcimiento, deben ofrecer dignidad y calidad de vida a sus habitantes durante todo el año. "Un pueblo debe ser habitable de enero a diciembre", ha declarado Valera.

Valera también ha reconocido que muchos de estos pueblos suelen ver multiplicada su población durante la temporada de verano, lo que plantea retos adicionales como la necesidad de ampliar los servicios de limpieza y mantenimiento de espacios públicos. Las ayudas ofrecidas se estructuran de manera que los municipios más pequeños reciben mayores cantidades per cápita para facilitar su adaptación a esta realidad estacional.

La primera de las ayudas se distribuirá en función del número de habitantes, otorgando 9.000 euros a los municipios de hasta 500 habitantes, 12.000 a los de hasta 1.000, 14.000 para aquellos con hasta 2.000, 16.000 a los de hasta 3.000, 18.000 a los que tienen hasta 4.000 y 20.000 euros a los que alcanzan los 5.000 residentes.

Por otro lado, la segunda línea de apoyo, que tiene como objetivo dinamizar la vida cultural de los pueblos mediante subvenciones a festejos, proporcionará entre 7.000 y 18.000 euros según el tamaño del municipio, con 7.000 euros para localidades de hasta 300 habitantes y un máximo de 18.000 para aquellas que tengan hasta 5.000 habitantes. De esta manera, se busca fomentar la tradición y la cohesión social en el entorno rural.