CIUDAD REAL, 13 de enero. La Guardia Civil ha tomado medidas firmes al investigar a un individuo que se encuentra en la mira de la justicia como presunto autor de un grave delito contra la seguridad vial. Este individuo fue sorprendido conduciendo un automóvil a la asombrosa velocidad de 213 kilómetros por hora en una autovía, donde la limitación establecida para este tipo de vehículos es de 120 kilómetros por hora, un caso alarmante que pone de manifiesto la irresponsabilidad al volante.

El hecho se registró a las 11:39 horas del pasado 21 de diciembre de 2024, cuando agentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Ciudad Real realizaban un control rutinario de velocidad. El dispositivo de monitoreo se encontraba ubicado en el kilómetro 186,500 de la Autovía del Sur A-4, que conecta Madrid con Cádiz, en el término municipal de Valdepeñas, donde el exceso de velocidad fue rápidamente detectado, generando preocupación entre los responsables de la seguridad vial.

Al proceder con las pruebas de alcoholemia, los resultados no fueron alentadores. El conductor arrojó un positivo de 0,30 mg/l en ambas pruebas realizadas. Esta cifra supera el límite legal permitido, lo que llevado a las autoridades a emitir un boletín de denuncia, en virtud del artículo 20.1 del Reglamento General de Circulación, que establece que es ilegal circular con una tasa de alcohol en aire espirado superior a los 0,25 miligramos por litro. Este boletín ha sido enviado a la Jefatura Provincial de Tráfico de Ciudad Real para su pertinente consideración y posible sanción.

Pero la situación no termina ahí. Los agentes también realizaron pruebas de detección de drogas en saliva al mencionado conductor, cuya respuesta fue igualmente preocupante, al resultar positivo en cocaína y cannabis en un control preliminar. Como consecuencia, se le notificó de otra infracción, esta vez bajo el artículo 14.1 de la Ley de Seguridad Vial, que prohíbe circular bajo los efectos de sustancias estupefacientes. Igualmente, este segundo boletín ha sido remitido a la Jefatura Provincial de Tráfico de Ciudad Real, evidenciando la gravedad de la situación y la necesidad de actuar enérgicamente contra quienes ponen en riesgo la seguridad de todos en las carreteras.