TOLEDO, 8 de septiembre. En un contexto de inicio de curso escolar, el secretario de Formación del PSOE en Castilla-La Mancha, Sergio García-Navas, ha subrayado la inversión sin precedentes que ha realizado el gobierno regional en recursos educativos, destacando la importancia de esta medida para fortalecer la educación pública en la región. Además, ha señalado que el Partido Popular no soporta el éxito y bienestar que se está experimentando en Castilla-La Mancha.

En una conferencia de prensa celebrada en la sede del PSOE, García-Navas enfatizó el compromiso continuo del gobierno de Emiliano García-Page con la mejora de los servicios públicos, resaltando que las políticas implementadas son verdaderamente progresistas y han traído consigo un cambio significativo en el panorama educativo regional.

Aseguró que el modelo actual de García-Page difiere notablemente del de su predecesora en la presidencia, María Dolores de Cospedal, argumentando que, mientras que en el pasado se producían despidos masivos y cierres de escuelas rurales, el presente se caracteriza por un aumento de la inversión educativa, más contrataciones de docentes y la mejora de infraestructuras.

El inicio del nuevo año escolar se traduce en la incorporación de 530 nuevos docentes, lo que junto a los esfuerzos dirigidos a hacer la educación más asequible para las familias –incluyendo medidas como la gratuidad de la educación para niños de 2 a 3 años y el acceso a un banco de libros–, convierte este regreso a las aulas en uno de los más económicos del país, afirmó García-Navas.

Adicionalmente, el secretario se refirió a la educación universitaria, destacando que la primera matrícula será gratuita en las universidades públicas de Castilla-La Mancha y Alcalá de Henares, lo cual representa un alivio significativo para los padres que envían a sus hijos a esta etapa educativa.

No obstante, García-Navas expresó su descontento con el Partido Popular en Castilla-La Mancha, acusándolo de criticar constantemente a la región y de no aceptar su progreso. Hizo una mención específica a la resistencia del PP en relación con la condonación de la deuda regional de 5.000 millones de euros, el cual considera una herencia negativa de la era de Cospedal.

Criticó la postura del PP, que alaba la falta de condonación de esa deuda, mientras plantea qué debería hacerse con el dinero ahorrado, catalogándolo como una demostración de hipocresía política y falta de liderazgo. Concluyó que esta actitud es perjudicial para el bienestar de la región y contrario a las necesidades de Castilla-La Mancha.