El guardia civil acusado de entrar en la vivienda del subdelegado del Gobierno de Cuenca en 2020 ha admitido los hurtos que se le imputan durante el juicio en la Audiencia Provincial. Alegó que lo hizo debido a su desesperación por conseguir dinero para evitar el embargo de su nómina y de la parte de la vivienda heredada de su padre.
En el juicio, la defensa aceptó parcialmente los hechos descritos por la Fiscalía y reconoció un delito leve continuado de hurto. Sin embargo, rechazó la acusación de allanamiento, argumentando que no había intención específica de invadir la privacidad del subdelegado.
La defensa solicitó una pena de dos meses de multa y defendió que no se puede inhabilitar de por vida al acusado, destacando que estaba pasando por dificultades económicas debido a la pandemia del Covid-19.
El acusado se apoderó de 50 euros y la defensa admitió que fue un error. Aseguraron que el acusado no intentó llevarse más que el dinero y que se arrepintió de sus acciones. Además, se disculpó públicamente durante el juicio.
En el juicio también declararon la pareja del subdelegado, quien comenzó un tratamiento contra la ansiedad al notar que alguien accedía a su hogar, y antiguos colegas del acusado. El Ministerio Fiscal mantuvo la acusación por allanamiento, mientras que la defensa argumentó que el deseo de obtener dinero anulaba esta acusación.
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