El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha criticado duramente al exportavoz de Sumar en el Congreso de los Diputados Íñigo Errejón por las acusaciones de acoso sexual en su contra, expresando su descontento con la idea de distinguir entre la persona y el personaje, tal como Errejón argumentó en su carta de renuncia al cargo.

Después de inaugurar una escuela infantil en San Carlos del Valle, García-Page ha declarado que él es presidente las 24 horas del día y no comprende la idea de separar la vida pública de la privada. Se cuestionó: "¿Desde cuándo se puede actuar de manera contraria en público y en privado?"

"Cada día nos encontramos con personas que parecen magníficas y resultan ser un desastre", subrayó, señalando que algunos "mienten descaradamente" y otros "faltan a la verdad repetidamente".

El mandatario lamentó la confusión generada por las redes sociales en la actualidad, donde es difícil discernir entre la verdad y la manipulación. En este clima de desconfianza, García-Page destacó la importancia de ser creíble en un momento en el que la credibilidad parece ser cuestionada constantemente.

Asimismo, hizo un llamado a la clase política para ser coherente y cumplir con sus promesas. Aunque reconoció que no siempre es posible cumplir con todo, enfatizó que la sociedad se mueve por la coherencia y que no se puede mentir sin consecuencias. "La impunidad no puede ser la norma", concluyó.