Crónica Castilla-La Mancha.

Crónica Castilla-La Mancha.

Page denuncia que autoridades del Levante desvían la atención de la gestión de la dana acusando a CLM de mala administración.

Page denuncia que autoridades del Levante desvían la atención de la gestión de la dana acusando a CLM de mala administración.

CIUDAD REAL, 15 de octubre.

En un reciente evento celebrado en el Teatro Municipal de Almagro con motivo del Día Internacional de las Mujeres Rurales, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, expresó su preocupación acerca de los ataques y descalificaciones que, según él, algunas autoridades del Levante han dirigido hacia los castellanomanchegos y sus regantes. Estas acusaciones, que sugieren que la región tiene el "grifo abierto" en lo que respecta al agua de riego, son vistas por García-Page como un intento de desviar la atención de los problemas reales que enfrenta el Levante, especialmente aquellos relacionados con la situación hídrica y los fenómenos meteorológicos adversos, como la dana.

Durante su intervención, García-Page hizo un llamado a romper los estereotipos negativos que, en su opinión, surgen de una mentalidad urbanita mal entendida. Afirmó que cada área tiene sus propias virtudes y defectos, pero se abstuvo de criticar directamente a nadie, centrándose en ofrecer una visión más constructiva del diálogo interregional.

El presidente también cuestionó las acusaciones de los responsables del Levante, que sostienen que Castilla-La Mancha está actuando de manera irresponsable en el uso del agua. Aunque se comprometió a proporcionar datos que sustentan su argumento, se limitó a hacer referencia a "diez sentencias" del Tribunal Supremo que afirman los derechos de su comunidad y que, según aseguró, aún no se han corregido adecuadamente.

Además, García-Page planteó la cuestión de las vastas extensiones de terreno en el Levante que carecen de una protección legal efectiva. Cuestionó la realidad de esa situación y subrayó que tanto Castilla-La Mancha como el Levante deben trabajar juntos para garantizar un uso sostenido y responsable del agua.

El presidente afirmó que su deseo es que las comunidades del Levante cuenten con suficiente agua para satisfacer sus necesidades, pero recalcó que Castilla-La Mancha también tiene el derecho a luchar por sus propios recursos hídricos, dado que históricamente se han establecido poblaciones cercanas a los ríos para garantizar este vital recurso. "Por eso, defendemos algo tan esencial como el agua", enfatizó.

Por último, García-Page sugirió que las víctimas del cambio climático deberían promover el uso del agua desalada del mar, en lugar de comprometer recursos naturales que son igualmente críticos para otras regiones, destacando así la necesidad de colaboración y responsabilidad en la gestión del agua.

Previamente, la consejera portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, enmarcó la polémica en un contexto de "ofensiva" que, según ella, busca modificar el Plan Hidrológico actual y retrasar la publicación de las reglas para la explotación del agua.

Padilla criticó las afirmaciones del presidente valenciano, Carlos Mazón, señalando que en las últimas semanas ha mentido con mayor frecuencia para ocultar su propia falta de acción. En una rueda de prensa, subrayó que los estudios presentados por la Generalitat adolecen de objetividad y no reflejan la verdad de la gestión hídrica existente.

La portavoz del Ejecutivo regional expresó que tales estudios dan a entender erróneamente que ya existe un borrador de las reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura, desmintiendo que el Gobierno de Castilla-La Mancha tenga acceso a dicho documento. Acusó a la Generalitat de intentar manipular el debate en lugar de abordar la realidad de la gestión del agua.

Padilla también argumentó que obstaculizar el flujo natural del Tajo para favorecer el trasvase representa una verdadera pérdida de recursos y afirmó que es fundamental que se cumplan las sentencias del Tribunal Supremo y la normativa europea relacionada con el agua. Instó a la Generalitat a adoptar un modelo de gestión que no dependa de la sobreexplotación de los recursos hídricos.

Finalmente, dejó claro que la honestidad es esencial en el debate sobre el agua y advirtió a Mazón que su tiempo para actuar de manera constructiva se está agotando, subrayando que la responsabilidad y la transparencia deben prevalecer en estos temas críticos que afectan a ambas regiones.