El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha realizado cambios en su gabinete ministerial, nombrando a Óscar Puente como nuevo ministro de Transportes y manteniendo a Isabel Rodríguez como ministra de Política Territorial, quien ahora también asumirá la cartera de Vivienda y Agenda Urbana.

Según fuentes de Moncloa, este será el nuevo reparto de carteras, con Puente encabezando el Ministerio de Transportes y Rodríguez al frente del Ministerio de Vivienda, siendo este último un área prioritaria para los socialistas en esta legislatura.

El Ministerio de Transportes y Movilidad se estableció en enero de 2020 tras la formación del Gobierno de coalición entre PSOE y Unidas Podemos, sucediendo al extinto Ministerio de Fomento.

Desde su creación, este ministerio ha sido liderado por solo dos ministros: José Luis Ábalos, quien ya estaba a cargo de Fomento desde la moción de censura de 2018, y posteriormente Raquel Sánchez, quien asumió el cargo en julio de 2021.

En este periodo, el sector del transporte ha enfrentado desafíos como la limitación de la movilidad debido a la crisis sanitaria, huelgas de taxistas y paros de camioneros que han afectado estas industrias, la competencia en el sector de alta velocidad, la gratuidad de trenes y autobuses, controversias relacionadas con el tren de Cantabria que llevaron a la destitución de los presidentes de Renfe y Adif, la apertura de nuevas rutas hacia Galicia, Murcia, Extremadura y Asturias, y el diseño de peajes en autopistas que finalmente no entrarán en vigor.

Para esta nueva legislatura, Óscar Puente deberá enfrentar el traspaso de los trenes de Cercanías de Cataluña (Rodalies) a la Generalitat, uno de los desafíos políticos más importantes, ya que abarca tanto la operación de los trenes como la infraestructura.

Además, el Gobierno continuará ofreciendo descuentos en el transporte durante todo el año, dependiendo de que las comunidades autónomas también subvencionen una parte. Esta política se mantendrá para menores, jóvenes y desempleados después del primer año.

Otro compromiso del Gobierno será impulsar la reducción de vuelos nacionales en rutas donde existan alternativas ferroviarias de menos de dos horas y media, excepto en aquellos casos que conecten con aeropuertos que tengan rutas internacionales.

Entre otros planes, se reabrirá la línea que conecta Zaragoza con Pau (Francia) a través de Canfranc, se impulsarán los Corredores Mediterráneo y Atlántico, se ampliará y modernizará la red de Cercanías en Valencia y la línea Alicante-Murcia conectando el Aeropuerto Alicante-Elche Miguel Hernández con ambas ciudades.

En Galicia se considerará la implementación de una red de Cercanías entre A Coruña y Ferrol y entre Vigo y Pontevedra, además de proporcionar descuentos en autopistas en la región. En Canarias, se mantendrá la bonificación del 75% en el transporte aéreo y marítimo para residentes, según los acuerdos alcanzados entre el PSOE y los diferentes partidos durante la investidura.

Por otro lado, Isabel Rodríguez estará a cargo del Ministerio de Vivienda, el cual se separa de otros ministerios y se establece como un departamento individual. La ministra tendrá como principal desafío poner en el mercado un total de 183,000 viviendas de alquiler asequible, incluyendo viviendas de Sareb, nuevas promociones y casas en suelo del Ministerio de Defensa.

También deberá desarrollar la nueva Ley de Vivienda, que entró en vigor al final de la legislatura pasada, y definir de inmediato el índice de precios de referencia para identificar zonas tensionadas y regular los precios de alquiler.

Además, se aumentará el Bono Alquiler, que actualmente brinda una ayuda de 250 euros a jóvenes menores de 35 años, y se revisará la regulación de los alojamientos turísticos en zonas con demanda de mercado. También se implementará un plan estratégico para impulsar la vivienda rural en áreas con retos demográficos.

Se establecerá un programa nacional de ayudas y subvenciones para mejorar la accesibilidad, habitabilidad y eficiencia energética de las viviendas. Se priorizará la rehabilitación de viviendas para mejorar la eficiencia energética, con el objetivo de alcanzar las 500,000 viviendas.

El Gobierno también tiene como objetivo adoptar mejoras en los préstamos hipotecarios en colaboración con las entidades financieras, facilitando la amortización anticipada de los créditos, la reestructuración de los préstamos y la solicitud de la dación en pago. También se busca hacer el mercado hipotecario más competitivo eliminando obstáculos a la portabilidad de hipotecas entre entidades, fortaleciendo la supervisión financiera y de competencia e impulsando la transparencia.