GUADALAJARA - 5 de noviembre.

La Guardia Civil, a través de su Comandancia en Guadalajara, ha logrado desmantelar un grupo delictivo que se dedicaba a la sustracción de cable telefónico en la Comunidad de Madrid y en Guadalajara. Se calcula que este entramado criminal robó alrededor de 4.500 metros de cable, lo que genera un perjuicio económico estimado en 170.000 euros tanto en mercancía como en daños colaterales.

La investigación, conocida como 'CUPRUNVIA', se inició a finales del año pasado, cuando aumentaron los robos de cable en siete localidades de la provincia de Guadalajara. Estos delitos causaron interrupciones temporales en el servicio telefónico, afectando en particular a la población mayor, muchos de los cuales dependen del servicio de teleasistencia.

Los delincuentes contaban con una organización bien estructurada, realizando vigilancias previas a los robos para seleccionar cuidadosamente los tramos de cable a cortar. Una vez seccionaban los cables, los trasladaban a lugares de difícil acceso, donde los quemaban para deshacerse del recubrimiento plástico, según han informado fuentes de la Guardia Civil.

Gracias a los operativos y las investigaciones de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Guadalajara y el Equipo de Policía Judicial de Sigüenza, se lograron detener a cuatro integrantes del grupo. Esto ocurrió cuando eran sorprendidos transportando 250 kilogramos de cable de cobre que acababan de robar.

Los agentes también pudieron identificar al resto de los implicados, acusándolos de al menos diez robos similares en diversas localidades de Guadalajara, así como en Coslada, Madrid. Se ha esclarecido además el destino final del cable sustraído, el cual era adquirido por un individuo de origen chino en una chatarrería de Leganés, donde se recuperaron más de 500 kilos de cable robado.

La investigación ha culminado con la detención de seis personas de nacionalidad rumana, cuyos rangos de edad oscilan entre los 21 y 59 años, bajo los cargos de pertenencia a grupo criminal, robo con fuerza, hurto y daños. Además, se investiga a un ciudadano chino por un delito de receptación, y se ha presentado todo el caso ante el juzgado de instrucción correspondiente en Guadalajara.