El pasado 7 de mayo, en la provincia de Cuenca, la Guardia Civil, con el respaldo de la Unidad de Seguridad Ciudadana, llevó a cabo un operativo que resultó en el desmantelamiento de una plantación ilegal de cannabis ubicada en un grow-shop. En la operación, las autoridades confiscó 132 plantas de marihuana, alrededor de un kilo de marihuana lista para la venta, varios envases etiquetados como CBD, además de 165 gramos de hachís y una cantidad significativa de productos derivados del cannabidiol.

Esta intervención se enmarca dentro del 'Plan Nacional de Actuación contra la Criminalidad Organizada Asociada al Tráfico de Drogas', promovido por el Ministerio del Interior. La Guardia Civil local recibió información a finales de septiembre del año anterior sobre un grow-shop en una localidad de la Mancha conquense, que no solo operaba como tienda, sino que también albergaba una plantación de cannabis sativa, y comercializaba productos que contenían inflorescencias de cannabidiol.

Ante esta situación, los agentes del Destacamento Fiscal y Fronteras de la Comandancia de Cuenca iniciaron una investigación minuciosa. A pesar de que el establecimiento y la vivienda estaban conectadas, la plantación de cannabis se hallaba en el interior de la casa, lo que complicaba la situación legal.

La investigación permitió reunir suficientes evidencias para llevar a cabo un registro del inmueble. Este proceso desveló tanto el modus operandi de los involucrados como la conexión con las actividades ilícitas que se realizaban desde el grow-shop.

Como resultado de esta operación, un individuo de 43 años fue detenido. Tanto el sospechoso como las evidencias recolectadas han sido remitidos al Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción nº 2 de Motilla del Palancar, en Cuenca, para continuar con los procedimientos legales pertinentes.