Cuenca, 31 de marzo. La Guardia Civil ha iniciado una investigación en torno a una mujer de 62 años que es sospechosa de haber cometido un grave delito de conducción temeraria. Este incidente ocurrió cuando la conductora manejaba su vehículo en dirección opuesta a la normativa establecida, recorriendo nada menos que 20 kilómetros en sentido contrario a lo largo de la autovía A-3, que conecta Madrid con Valencia.

La alerta se generó cuando varios transeúntes de la autovía reportaron la presencia de un automóvil que circulaba de forma errónea. En respuesta, los agentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil, en colaboración con el Servicio de Urgencias y Emergencias 112 de Castilla La Mancha, lograron interceptar el coche en el kilómetro 187 de la A-3, dentro del término municipal de Tébar, en la provincia de Cuenca.

Como resultado de esta peligrosa maniobra, la conductora ha sido objeto de una investigación por parte de las autoridades, enfrentándose a un posible cargo relativo a la seguridad vial por su inquietante manera de conducir. Según la información publicada por la Guardia Civil, todas las diligencias se han registrado y enviado al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de guardia de Motilla del Palancar.

Afortunadamente, este incidente no dejó heridos ni daños materiales que lamentar. Sin embargo, la mujer podría enfrentar consecuencias severas, que van desde una pena de prisión de seis meses a dos años, además de la posibilidad de perder su derecho a conducir vehículos motorizados por un período que podría oscilar entre un año y seis años.