TOLEDO, 7 Ago.

La favorable evolución epidemiológica de la viruela ovina y caprina en Castilla-La Mancha ha llevado a la flexibilización de las restricciones de movimiento de ganado por parte de la Comisión Europea en la región. A partir de este lunes, 7 de agosto, se levanta la vigilancia en varios municipios de las provincias de Ciudad Real y Toledo.

Según ha informado el ministerio del ramo, la estricta aplicación de las medidas de lucha contra la viruela ovina y caprina adoptadas por los servicios de sanidad animal de la Junta de Castilla-La Mancha, con la imprescindible colaboración de ganaderos y veterinarios, ha permitido el control efectivo de la enfermedad. No se han detectado nuevos casos desde el último foco registrado el 17 de mayo en una explotación de ovino en el municipio de Casas de Fernando Alonso (Cuenca).

Además, a petición de España, la Comisión Europea ha modificado la Decisión (UE) 2022/2333, relativa a determinadas medidas de emergencia en relación con la viruela ovina y la viruela caprina en España. Esto permitirá el movimiento de animales desde la zona de restricción adicional, que abarca las provincias de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo, hacia zonas libres para su sacrificio en matadero, así como para su traslado a explotaciones de producción y cebaderos.

Para ello, será necesaria una inspección clínica previa con resultados favorables y una estancia mínima de los animales de 30 días tanto en el lugar de origen como en el de destino.

De este modo, la limitación de movimiento de animales por la enfermedad se mantendrá hasta el 25 de septiembre exclusivamente en la zona de restricción adicional.

Si no se registran nuevos brotes, en esa fecha todo el territorio nacional recuperará el estatus de libre de viruela ovina y caprina.