En una sorpresiva decisión, el Partido Popular ha presentado una enmienda que ha dejado en suspenso la reforma del Estatuto de Autonomía en Castilla-La Mancha, generando decepción en el Gobierno regional. Según el vicepresidente segundo, José Manuel Caballero, esta situación es desalentadora ya que el acuerdo entre el PP y el PSOE tenía como objetivo mejorar los derechos y la representación de la Comunidad Autónoma.
Para Caballero, la falta de capacidad, fuerza y valentía por parte del Partido Popular en Castilla-La Mancha para tomar decisiones en beneficio de la región es evidente. Este hecho refleja la ausencia de compromiso con la autonomía de la región al no permitir la aprobación de una reforma que significaría un avance para los habitantes de Castilla-La Mancha.
El vicepresidente segundo recalcó la importancia de contar con gobernantes que defiendan a la región y que antepongan los intereses de esta sobre los partidistas. Por otro lado, destacó la fortaleza y liderazgo del presidente regional, Emiliano García-Page, quien ha sabido reclamar al Gobierno de España en defensa de Castilla-La Mancha en situaciones críticas.
Un claro ejemplo fue la influencia de García-Page para evitar la conversión del aeropuerto de Ciudad Real en un centro de recepción de inmigrantes, decisión que se consideraba contraria a los derechos humanos y la dignidad de los migrantes. Caballero sugiere que si la decisión hubiera estado en manos del presidente del Partido Popular, probablemente se hubiera llevado a cabo, lo que resalta la importancia de tener líderes comprometidos con su región.
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