CUENCA, 6 de mayo. Este miércoles, la Audiencia Provincial de Cuenca llevará a cabo un juicio que ha captado la atención de la comunidad local, donde K.A.G.M. afronta una acusación seria que podría resultar en una condena de hasta siete años de prisión por un presunto delito contra la libertad sexual de una amiga de la infancia.

Inicialmente, dicha audiencia estaba programada para el 17 de octubre de 2024; sin embargo, se ha reprogramado, retrasándose casi siete meses. Según el informe de la Fiscalía al cual tuvo acceso Europa Press, los eventos que están en el centro de este caso ocurrieron el 4 de septiembre de 2021, cuando el acusado y la denunciante compartían una velada de consumo de alcohol en Cuenca, lo que posteriormente desencadenaría en una serie de sucesos desafortunados.

Tras la noche de diversión, K.A.G.M. ofreció acompañar a su amiga hasta su hogar. Una vez allí, pidió quedarse a dormir, a lo que la joven accedió, condicionando la solicitud a que él no utilizara su dormitorio. Aunque ambos se retiraron a habitaciones separadas, K.A.G.M. decidió entrar en el cuarto de la amiga, quien se encontraba en un estado de embriaguez que comprometía su capacidad de consentimiento, tal como señala el documento fiscal.

En un momento crítico, aprovechándose de la situación, el acusado realizó tocamientos inapropiados sobre la joven, que se encontraba profundamente dormida. En ese instante, la víctima tomó conciencia de la situación pero no pudo responder adecuadamente, limitándose a expresar su negación hacia cualquier tipo de acto sexual, según la acusación presentada por la Fiscalía.

Días después de lo acontecido, la víctima decidió presentar una denuncia formal por el incidente, alegando que se trataba de un delito contra la libertad sexual, conforme a los artículos 181, 191 y 192 del Código Penal, que en su versión vigente al momento de los hechos resulta más beneficiosa para el acusado. La Fiscalía, en respuesta a la gravedad de las acusaciones, ha solicitado no solo una sentencia de siete años de prisión, sino también medidas de protección, como una orden de alejamiento de 17 años y una indemnización de 3.000 euros por los daños emocionales sufridos por la víctima.