El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha emitido un comunicado tras la llamada telefónica que mantuvo con el candidato del PP a la Presidencia del Gobierno, Alberto Núñez Feijóo, en la semana previa a su investidura. García-Page ha dejado claro que "el que intente responsabilizar al PP del déficit buscando tránsfugas del PSOE se equivoca". Además, ha afirmado que "el gobierno de España no puede ser víctima de 'Tamayazos', aunque el PP quiera desviar la atención".
En una entrevista en la Cadena SER, García-Page ha especificado que la llamada fue en términos protocolarios después del compromiso por parte de Feijóo de contactar con cargos públicos. "Me ha preguntado sobre lo más relevante de la región y los temas que podrían interesarnos de cara a la investidura, de manera educada", añadió.
Sin embargo, García-Page ha dejado claro que Feijóo no le ha pedido apoyo para la investidura, y en cualquier caso, "no le habría servido de mucho". Aunque reconoce que tiene "diferencias críticas" con su partido en algunos puntos, defiende su libertad para expresar su opinión, pero a la vez separa la idea de que "la alternativa de que gobierne el PP" es mejor que la de Pedro Sánchez.
Según García-Page, desde principios de septiembre, el PSOE ha respetado los tiempos de Feijóo, pero la situación se ha desbordado debido a que el PP interpretó que, a pesar de haber ganado las elecciones, las había perdido, mientras que el PSOE interpreta que las ganó a pesar de no haberlas ganado. En la actualidad, preocupa la idea de que tras las elecciones se pueda hacer cualquier cosa.
A pesar de todo, García-Page afirma que el PP ya ha pasado página y da por hecho que no logrará sacar adelante la investidura, por lo que "ha pasado al ataque". Critica que todo el mundo ataque al gobierno de Pedro Sánchez sin que nadie se defienda.
En cuanto a la amnistía, García-Page prefiere no dar por hecho que se pueda aceptar la amnistía para los acusados del 'procés' en las negociaciones para la investidura, pero siempre defenderá un gobierno de Pedro Sánchez a pesar de las cosas criticables. Reconoce que hay declaraciones de cargos socialistas en julio negando la posibilidad de aceptar la amnistía, por lo que algo debe haber ocurrido para que ahora se contemple.
No obstante, García-Page considera importante no jugar con estos temas y se limita a opinar sobre la amnistía dentro de los plazos establecidos por el gobierno. Respecto a si se plantea liderar el PSOE, García-Page afirma que sería "una tontería" decir que el partido estaría en problemas si él no fuese presidente con mayoría absoluta. Considera que su coherencia en los argumentos lo respalda y su credibilidad no aumenta por tener mayoría absoluta, sino todo lo contrario.