TOLEDO, 23 Ene. - El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha pedido enfáticamente que se resuelva la deuda acumulada con la región debido al actual modelo de financiación autonómica antes de implementar un nuevo modelo.

García-Page ha expresado que esto es "obvio" y ha reiterado que el actual modelo de financiación "claramente perjudica a cuatro comunidades autónomas, siendo injusto y resultando en una infrafinanciación objetiva".

"Puede haber opiniones para todos los gustos, pero es innegable que antes de embarcarnos en un nuevo modelo, debemos saldar nuestra cuenta pendiente con el modelo actual", ha insistido, añadiendo que Castilla-La Mancha buscará llegar a un consenso con el Estado para resolver esta deuda, ya sea antes de las negociaciones del nuevo modelo o durante el proceso de negociación.

"Es una cuestión de justicia, y lo mismo reclamarán Andalucía, Murcia y la Comunidad Valenciana, ya que las cuatro, tanto en informes públicos como privados, han salido perjudicadas objetivamente por el modelo de financiación", afirmó.

A pesar de esto, García-Page ha enfatizado que según su opinión, hay un "consenso unánime en toda España" para exigir un nuevo modelo de financiación autonómica "que sea diseñado especialmente para enfrentar los desafíos de las competencias autonómicas de la próxima década, y que se logre a través del consenso".