TOLEDO, 24 de mayo. La Audiencia Provincial de Toledo se prepara para llevar a cabo, el próximo martes 27, un juicio que tiene como protagonista a J.M.F.G., una mujer acusada de un grave delito contra la salud pública. El Ministerio Fiscal exige para ella una condena que podría ascender a tres años y medio de prisión, así como una multa de 150 euros.

Según las conclusiones provisionales del Fiscal, que han sido divulgadas por Europa Press, el suceso tuvo lugar el 24 de julio de 2023, alrededor de las 11:00 horas. En esa jornada, la acusada, M.M.O., acudió al Centro Penitenciario de Ocaña I con el propósito de mantener un encuentro personal con su pareja, J.M.F.G., quien se encontraba cumpliendo una condena en ese centro.

Durante el encuentro, antes de que se iniciara la visita, M.M.O. fue sometida a un control de seguridad. En ese momento, las autoridades la encontraron en posesión de 0,6 gramos de MDMA, con una pureza del 31,07%, y 0,6 gramos de ketamina, cuya pureza alcanzaba el 33,3%. Ambas sustancias estaban escondidas en su sujetador y, según se ha indicado, tenían como objetivo ser distribuidas entre otros internos a cambio de dinero.

Los informes revelan que el valor total de los 0,6 gramos de MDMA en el mercado negro asciende a 27,38 euros, mientras que la ketamina intervenida tendría un precio equivalente de 26,98 euros. Este caso pone de manifiesto los serios desafíos que enfrenta el sistema penitenciario en la lucha contra el tráfico de sustancias ilegales dentro de sus muros.