En un contexto donde la posibilidad de un cambio político en Castilla-La Mancha se siente más tangible que nunca, Movimiento Sumar ha manifestado su intención de establecerse firmemente en el Parlamento autonómico. Desde su sede en Campo de Criptana, los coordinadores de esta agrupación, María Rodríguez y Jesús Plaza, subrayan la necesidad de ofrecer opciones a una población que siente que sus intereses no están siendo representados adecuadamente.

En una reciente entrevista, Rodríguez y Plaza admitieron que los comicios del próximo año se presentan desafiantes, aunque están decididos a maximizar su influencia en el ámbito político regional. Reconocen que existen "sensibilidades no atendidas" en la comunidad, y enfatizan la importancia de contar con "contrapesos" en la política local para evitar que una única tendencia domine el panorama político.

El Gobierno de España se ha convertido en un modelo a seguir para ellos. Según Plaza, la reciente experiencia de un Gobierno de coalición ha traído consigo avances significativos, como el aumento del Salario Mínimo Interprofesional. Esta situación podría, en su opinión, ser ventajosa si se replicara en la región, sugiriendo que un poco más de apoyo al Gobierno nacional podría traducirse en mejores resultados para los ciudadanos castellano-manchegos.

Los líderes de Movimiento Sumar consideran que sería beneficioso contar con una administración similar a nivel local que impida los abusos de poder que pueden surgir con mayorías absolutas, y sostienen que un gobierno en coalición podría equilibrar la situación política en Castilla-La Mancha.

Asimismo, el partido busca abordar temas que consideran desatendidos, como los relacionados con la maternidad y el feminismo. Rodríguez y Plaza mencionaron que ya han iniciado conversaciones con Izquierda Unida para explorar posibles colaboraciones, aunque reconocen que aún no tienen acuerdos concretos. La idea es establecer un espacio político sólido donde ambas fuerzas puedan trabajar en conjunto, a pesar de sus diferencias inherentes.

Ambos coordinadores, sin embargo, manifestaron su preocupación por las críticas dirigidas a su formación por parte de Podemos, deseando que estas no desvíen la atención del verdadero objetivo: mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Rodríguez destacó la importancia de mantener el enfoque en proyectos progresistas que beneficien a la sociedad en su conjunto.

En lo que respecta a alianzas, mencionaron la necesidad de dialogar también con el PSOE de Castilla-La Mancha, destacando la existencia de sectores dentro del partido que comparten su descontento. Plantean que este diálogo es fundamental ante la posibilidad de que partidos de derecha, como Vox, ganen terreno en la región, lo que consideran un escenario preocupante.

Plaza hizo hincapié en que no buscan polarizar ni hacer políticas divisivas, pero ven la necesidad de unirse ante el riesgo de que la derecha vuelva a tomar el control. Reconocieron que esta circunstancia podría forzar un entendimiento en la izquierda, ya que las alternativas son preocupantes.

A pesar de mantener una posición firme contra Vox —a quienes no consideran interlocutores viables—, están abiertos al diálogo con un hipotético "PP progresista". Sin embargo, lamentan que el actual Partido Popular en Castilla-La Mancha parece más alineado a intereses nacionales que a las necesidades locales.

Con un enfoque en la justicia social y una comprensión de las dificultades de los ciudadanos, Movimiento Sumar se está organizando en toda la región, a la espera de ratificación de su candidatura autonómica. Su enfoque incluye la atención a problemas urgentes como la situación de los servicios sociales, la dignidad laboral y la crisis de vivienda, destacando su compromiso por acercarse a la gente y entender sus necesidades.

Finalmente, los coordinadores plantean que elevar los problemas ciudadanos a instancias más altas puede ayudar a reducir la desafección política, especialmente en la juventud, un colectivo que se siente cada vez más alejado del actual escenario político en España.