La Guardia Civil de Ciudad Real ha llevado a cabo una operación denominada "Stay" en la que se ha puesto a disposición judicial a tres personas acusadas de cometer delitos de "childgrooming", "ciberstalking" y exhibicionismo ante menores de edad. Los delitos se cometieron a través de las redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea y fueron denunciados por los padres de los menores afectados.

Los investigadores del Equipo de Investigación Tecnológica (Edite) de la Guardia Civil tuvieron que emplear su pericia para determinar la verdadera identidad de los autores, quienes se encontraban ocultos bajo pseudónimos falsos para obstaculizar la investigación policial. Finalmente, se logró identificarlos y se procedió a ponerlos a disposición judicial en los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Puertollano y el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción número 1 de Almagro.

La Guardia Civil alerta sobre la amenaza que existe entre los menores que acceden a las redes sociales en edades cada vez más tempranas y sin la madurez necesaria, y de lo que se aprovechan otras personas para establecer un grado de amistad con las víctimas y mostrar empatía en las primeras conversaciones. Una vez que han ganado su confianza, los autores comienzan a incitar a las menores a mandar fotografías, primero vestidas y luego mostrando alguna parte del cuerpo. Finalmente, cuando ya tienen las primeras fotografías, amenazan con difundirlas si las menores no les siguen enviando, llegando en algunos casos a proponerles abandonar su domicilio para irse con ellos.

La Guardia Civil advierte del miedo de las víctimas a poner en conocimiento de sus padres los hechos y del estado de culpabilidad de las mismas como los principales motivos por los que este tipo de delitos no se denuncian o se denuncian demasiado tarde.