El alcalde de Noblejas, Agustín Jiménez, ha hecho sentir su voz en una reciente rueda de prensa, donde expuso su descontento con el Gobierno regional por lo que considera un ataque directo a su municipio en detrimento de Ocaña. Su mensaje es claro: "Algún día seremos un solo pueblo".

Jiménez, quien ha recurrido a la huelga de hambre como medida de protesta para solicitar la construcción de un nuevo instituto de Educación Secundaria en Noblejas, explica que esta no es una acción impulsiva, sino el resultado de un proceso que lleva 18 años en marcha.

Rememorando el inicio de este proyecto, el alcalde afirmó que se remonta a 2007, aunque notablemente, Noblejas no había tenido previamente la necesidad de un instituto. Según él, tras una aprobación unánime en un pleno municipal, las expectativas se vieron ensombrecidas por lo que califica como una continua "agresión" por parte del presidente regional, Emiliano García-Page.

El conflicto se intensificó en 2007, cuando García-Page estuvo al frente de los socialistas toledanos, afirmando que su labor fue obstruir el desarrollo de la localidad. A partir de 2011, luego de los recortes del Gobierno del PP, Jiménez pensó que la llegada del PSOE al poder en 2015 podría significar un cambio positivo para Noblejas.

Frente al argumento del Gobierno de que ya se había construido un instituto en Ocaña, Jiménez sostiene que, a largo plazo, ambos municipios se fusionarán en una sola entidad urbana. Critica a quienes, a su juicio, fomentan divisiones entre la población: "¿Cuántas toneladas de odio se necesitan para tratar de socavar el esfuerzo político de un municipio?", planteó el alcalde. "Ocaña y Noblejas formarán un todo urbano, administrativo y funcional".

Jiménez no dudó en responder a las afirmaciones de la portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, a quien acusó de desinformar a la ciudadanía. Durante su intervención, destacó que lo que está en juego es el bienestar de su pueblo, en un contexto de "sectarismo y desprecio" hacia sus demandas.

El alcalde, que cuenta con supervisión médica durante su huelga de hambre, subrayó que su objetivo no es buscar la heroína, sino captar la atención necesaria sobre su causa. En un tono provocador, instó a los ciudadanos a adoptar una postura similar a la de Felipe González en las urnas, sugiriendo que voten en blanco y cuestionando la capacidad del PSOE para representar los intereses de Noblejas.

"Si no te importa tu pueblo, ¿cómo puedes esperar recibir votos aquí?", enfatizó Jiménez antes de concluir la rueda de prensa, durante la cual obsequió a los periodistas con cajas de magdalenas, dejando claro que no tiene intención de consumirlas él mismo.