La Guardia Civil de Guadalajara acaba de protagonizar un importante golpe contra el tráfico de drogas. En el marco de la denominada operación 'Talavero', los agentes han conseguido incautar un total de 2.100 kilogramos de marihuana que se encontraban almacenados en una nave ubicada en el polígono industrial 'La Quinta' de Cabanillas del Campo. Además, también han detenido al responsable de la mencionada instalación, un varón de 41 años de edad.
Según ha explicado el instituto armado en una nota de prensa, la operación se inició el pasado mes de marzo. En concreto, un camión frigorífico que había sido sustraído en la provincia de Alicante fue encontrado en las inmediaciones del polígono de Cabanillas del Campo. Dicho vehículo levantó las sospechas de los agentes, ya que podría estar relacionado con el tráfico de drogas. Por ello, iniciaron una investigación que les llevó hasta la nave donde finalmente han localizado la marihuana.
Las pesquisas de la Guardia Civil se centraron en esta instalación, que aparentemente se encontraba sin actividad. Los agentes sospechaban que se estaba utilizando como centro de almacenamiento de drogas. Finalmente, han conseguido incautar una importante cantidad de marihuana que estaba distribuida en 59 cajas de grandes dimensiones perfectamente embaladas, presumiblemente, para su posterior distribución.
Asimismo, también se ha localizado una báscula industrial que podría haber sido utilizada para el pesaje de la "mercancía". La Unidad Orgánica de la Policía Judicial, encargada de la investigación, ha procedido a la detención del responsable de la nave, quien está siendo investigado por un delito contra la salud pública por tráfico de drogas.
En definitiva, la Guardia Civil de Guadalajara ha conseguido dar un importante golpe al tráfico de drogas con la incautación de estas 2.100 kilos de marihuana. Un total de 59 cajas que estaban destinadas a su distribución han sido encontradas en una nave del polígono industrial 'La Quinta' de Cabanillas del Campo. La detención del responsable de la instalación, un varón de 41 años, acusado de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas, ha sido el broche final de una operación que se inició el pasado mes de marzo.