TOLEDO, 30 Sep.

El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural del Gobierno de Castilla-La Mancha, Julián Martínez Lizán, ha expresado su preocupación ante la posibilidad de que la cabaña ganadera de rumiantes de la región pueda verse afectada por el serotipo 1 del virus de la lengua azul en un futuro cercano, debido a la proximidad con Extremadura, donde se han reportado casos la semana pasada.

En declaraciones a los medios después de una conferencia de prensa, Martínez Lizán mencionó que en el campo "no hay manera de controlar todo" y que esta enfermedad se transmite a través de un vector como un mosquito que puede desplazarse junto al ganado.

El consejero señaló que actualmente no se tiene constancia de otro tipo de virus que no sea el serotipo 4, con el que la cabaña ganadera de Castilla-La Mancha ha convivido durante muchos años. Sin embargo, la presencia del serotipo 1 en Extremadura es motivo de preocupación y se están llevando a cabo reuniones inminentes para analizar su posible propagación a otras regiones.

"Dada la cercanía, en Castilla-La Mancha, junto con Andalucía y Castilla y León, estamos en riesgo de ser una de las próximas regiones en sufrir la presencia de este virus", advirtió.

Los Servicios Veterinarios Oficiales de la Junta de Extremadura informaron hace una semana sobre la detección de un serotipo 1 del virus de la lengua azul en una explotación de ovino en Almoharín, Cáceres, una situación preocupante ya que la región se consideraba libre de este serotipo, por lo que la cabaña ganadera no está vacunada contra él y carece de protección inmunológica.